"Fue mi sospechoso desde el principio"

Juan José Cortés, el padre de Mari Luz, sospechó desde el primer día que el responsable de la desaparición de su hija era Santiago del Valle García. El 13 de enero, el día en que perdió el rastro de su hija, vecinos y familiares de la niña entraron en la casa del ahora detenido como presunto autor de la muerte de la pequeña. "Le pregunté a mi hermano por qué había entrado en aquella casa", recordaba ayer Juan José, "cuando me contó lo que este hombre había hecho, que había abusado de su hija y de otras niñas, supe que nunca más volvería a ver a Mari Luz con vida".

Juan José Cortés: "Deseo que nadie más sufra los abusos de este hombre"

Dentro del inmueble del detenido, que Juan José registró, los vecinos y los familiares de Mari Luz hallaron detalles que les hicieron sospechar. "La hermana dijo que su coche estaba en la puerta y en realidad estaba en otro lugar. Y había unos pañuelos, que ellos vendían, apilados. Y al dado, un carrito que estaba vacío". Además, Juan José recordó que desde el primer momento, Del Valle "negó todo, incluso antes de que nosotros le dijéramos nada".

Tras conocer las detenciones de Santiago del Valle, su mujer y su hermana, el padre de Mari Luz dijo en una multitudinaria rueda de prensa celebrada en la calle donde vive la familia, que se había dado un paso importante, "aunque no el definitivo", para hacer justicia con su hija. No obstante, Juan José dijo que se puede sentir satisfecho: "Sé que se va a hacer justicia. Deseo que este hombre que está ahora detenido, que tanto se ha burlado de la justicia, no lo haga de nuevo y nadie tenga que pagar más sus abusos".

Juan José no perdió ayer la entereza y la serenidad que ha mostrado estos meses de angustia, y que soportó incluso cuando su hija fue hallada muerta el 7 de marzo en la desembocadura del río Tinto. "Quiero pedirle a todo el mundo paciencia y calma, aunque sé que hay rabia intensa. Sé que, al final, se va a poner a estas personas en su sitio", dijo en referencia a los detenidos. Y con el mismo tono, aseveró: "He estado buscando a mi hija más de cincuenta días y no le deseo, ni al asesino de mi hija, que pase un sólo día como los que yo pasé"

A la rueda de prensa acudieron casi una treintena de equipos de televisión junto a una nube de periodistas de varios países. Con ellos también se congregó un centenar de vecinos, que atendieron a las palabras de Juan José. Durante todo el día de ayer, los habitantes de El Torrejón se mostraron serenos, aunque expresaron la rabia que sentían, incluso con peticiones de pena excesivas. "Que lo cuelguen de una grúa y se seque como un bacalao", solicitaba uno.

Los vecinos también fueron interrogados por los medios de comunicación acerca de la vida de Santiago del Valle. Pepi, que vive en la planta de arriba a la del detenido, le recuerda a él, a su mujer y a su hermana como personas introvertidas. "Pero él tenía algo que no gustaba. Cuando mi hija de 14 años tenía que cruzar su puerta para subir lo hacía muy rápido. '¡Qué miedo da ese payo, mamá!', me decía". Y eso que, ni Pepi ni su hija sabían nada de los truculentos antecedentes de su vecino.

Tampoco Juan José Cortés sabía mucho de los detalles que acompañaban al historial de su vecino. "Después de que desapareciese mi hija, me dijeron que se había apuntado al colegio de Mari Luz para recibir clases y que había sido expulsado por la cercanía a las niñas, y que lo mismo había hecho en Gijón, ciudad de la que provenía cuando llegó a Huelva hace unos meses".

En relación con la enfermedad mental que el presunto autor del crimen y su mujer padecen, el padre de Mari Luz quiso ser meridiano. "Puede que esta persona sea tonta, pero no está loco. Lo que ha hecho, lo ha hecho conscientemente y además, lo ha intentado más veces", aclaró. Además, recordó que Del Valle ha sido capaz de "burlar a la justicia, de ocultar la muerte de la pequeña más de dos meses, de tener un plan para esconderse y de tratar de escapar del país".

Tras la rueda de prensa, los vecinos se concentraron en un minuto de silencio. Al término del mismo, rompieron en gritos reclamando justicia para Mari Luz.