Los seguidores de Rojo aplazan la comisión electoral decisiva en la Vital

La reelección de Gregorio Rojo al frente de la Caja Vital está a punto de convertirse en un culebrón. Los tres miembros de la Comisión de Control pertenecientes a la plataforma impulsada por el PSE, no comparecieron ayer a la reunión de este órgano que tenía que estudiar si los candidatos propuestos para el consejo de administración de la entidad reúnen los requisitos requeridos. En la plancha propuesta conjuntamente por la coalición PSE-PNV, figura el socialista Gregorio Rojo como candidato a repetir en la presidencia de la entidad y el líder del PNV alavés, Iñaki Gerenabarrena, para ocupar un alto cargo en la comisión ejecutiva.

"El PP ha cometido un error de fondo y forma al convocar la comisión electoral"

"No podemos permitir que PSE y PNV jueguen con la institución"

Esa incomparecencia impidió el quórum necesario para constituir la comisión y que se tomara algún acuerdo. "Es un claro boicot de la alianza socialista y nacionalista contra los órganos de la caja", criticó ayer el presidente de los populares alaveses, Iñaki Oyarzabal. El PP está intentando por todos los medios evitar la reelección de Rojo, alegando que supera el tope de 12 años de continuidad en cargos de gobierno que marca la ley.

Fuentes próximas a la plataforma impulsada por el PSE atribuyeron, sin embargo, su postura a un defecto de forma y de fondo. La convocatoria de la comisión, que según los estatutos debe hacerse con 48 horas de plazo, llegó a manos de sus miembros ayer por la mañana, aunque era pública. Además, dichas fuentes critican que la redacción del orden del día no se ajustaba al trabajo que ha de hacer esa comisión. En vez de convocar a los miembros al "Estudio de las candidaturas", la convocatoria era para la "Aceptación de las candidaturas".

Ante tal situación, los miembros de la plataforma que impulsa el PSE convocaron a una nueva reunión para las 17 horas del día 27, última jornada posible, según los estatutos para estudiar las candidaturas. Poco después el PP volvió a convocar para ese mismo día, pero a las 21 horas, ya que la nueva convocatoria tampoco cumplía con las 48 horas de antelación.

A partir de este momento las interpretaciones son libres, y toma cuerpo que la reelección del presidente de la Vital acabe en los tribunales de justicia. Si el día 27 la comisión electoral no adopta ningún acuerdo porque o bien no hay quórum o algún miembro de la comisión se abstiene e impide que haya la mayoría absoluta necesaria para adoptar decisiones, todo quedará en manos de la Asamblea General del domingo día 30.

Fuentes próximas a la plataforma impulsada por los socialistas entienden que la asamblea es un órgano de mayor rango que la Comisión de Control electoral y tiene capacidad para enmendarle la plana. En la asamblea, PNV y PSE, tienen mayoría suficiente (superior a los dos tercios) como para sacar adelante su candidatura al consejo de administración. La plancha del consejo de administración sería aprobada el mismo domingo y el lunes el consejo nombraría presidente a Rojo, quien a su ven elegiría la comisión ejecutiva. Previsiblemente en medio de un gran revuelo, el PP intentará boicotear esa votación.

Oyarzabal ya ha anunciado que la reelección de Rojo acabará en ese caso en los tribunales. "No podemos permitir que jueguen con la institución y con su prestigio", criticó.