La nieve obliga a cortar carreteras y llena las estaciones de esquí

La Semana Santa acabó ayer con nieve en zonas del Pirineo y con luto en las carreteras catalanas, donde se han registrado 12 muertes, las mismas que en el año anterior. La nieve obligó a cortar carreteras y animó las estaciones de esquí. En la Val d'Aran hubo una intensa nevada. Por la tarde había cuatro carreteras cortadas: en Lleida -la C-142b para acceder a Pla de Beret y la C-28 en el Port de la Bonaigua- y en Barcelona, la BV-4024 hacia Coll de Pal y la BV-4031 en Castellar de n'Hug hacia La Molina (Cerdanya).

Colas en Tarragona y cuatro carreteras cortadas al final de las vacaciones

"No esperaba estas cifras. Revisaremos la estrategia", dice el director de Tráfico

Las estaciones de La Masella y de La Molina cerraron la última semana estrella de la temporada con excelentes números. Para La Masella ha sido el mejor periodo vacacional de la primavera de los últimos 10 años, gracias a la calidad de la nieve, al buen tiempo y al volumen de esquiadores. Entre el 15 de marzo y ayer, La Masella calcula que habrán esquiado en sus pistas unas 43.000 personas. La Masella se plantea mantener abierta la estación dos semanas más y cerrar a finales de marzo.

En La Molina, en cambio, el cierre está fijado para mediados de abril. La mayoría de estaciones de esquí catalanas seguirán el mismo camino, siempre dependiendo del estado de la nieve.

Los 12 muertos en las carreteras han sido un mazazo. La Generalitat quería reducir esa cifra a, como máximo, nueve. Los malos datos contrastan con una sensible mejora en el resto de España, donde ha habido 61 muertos, el 41% menos que el año pasado. En Cataluña, el número de muertes no baja desde hace tres años.

"No esperaba estas cifras. No tenemos explicación. Sólo puedo avanzar que revisaremos nuestra estrategia", dijo ayer el director del Servicio Catalán de Tráfico, Josep Pérez Moya.

La operación retorno se desarrolló con colas y retenciones desde la mañana. En Tarragona, el Servicio Catalán de Tráfico (SCT) registró varios tramos de circulación intensa, tanto que en algunos puntos obligaba a los conductores a detenerse, concentrados en la AP-7 entre Mont-roig del Camp y El Vendrell, siempre en dirección a Barcelona. Los 15 kilómetros ante el peaje de El Vendrell y otros 15 ante el de Tarragona fueron los tramos más complicados.También hubo colas en la N-340, alternativa gratuita a la AP-7, en El Vendrell -siete kilómetros- y en Tarragona -cinco kilómetros.

En Girona, la tarde fue bastante tranquila en las carreteras, después de una mañana con tráfico más intenso y congestión de vehículos. El incidente más grave se produjo en la vía G-682 en Tossa de Mar (Selva), donde un motorista perdió la vida al chocar frontalmente contra un autobús. También se registró intensidad de tráfico en la carretera C-65 en Cassà de la Selva (Gironès) en dirección a Girona, con retenciones de hasta tres kilómetros en el carril de incorporación. Otro punto donde se formaron retenciones de más de un kilómetro fue en la carretera C-31, en el tramo comprendido entre Santa Cristina d'Aro y Calonge (Baix Empordà).

Información elaborada por Ferran Balsells, Oriol Aymí, Natalia Iglesias y Rafael Carbonell.