"No se puede hacer oposición con los recursos hídricos"
Faltan dedos en una mano para contar el número de entidades de la Organización Naciones Unidas (ONU) que, de una manera u otra, se ven implicadas en el tema del agua. A las ya existentes, se añadió una nueva, la Oficina para el Decenio del Agua (2005-2015), que tiene sede en Zaragoza y cuyo rostro visible es Carlos Fernández Jáuregui (Bolivia, 1950). El coordinador del proyecto visitó ayer el Museo Marítimo de Bilbao y participó en un seminario previo al Día Mundial del Agua (22 de marzo).
Su cautela a la hora de criticar a países en concreto denota que lleva muchos años trabajando en diferentes organismos de la ONU, donde los que ponen la última coma, quitan un párrafo o echan atrás una iniciativa son los Estados que la componen. "La ONU es el reflejo de los países miembros, y hace lo que los éstos le dejan hacer", resume antes de recordar que un niño muere cada tres segundos en el mundo por problemas relacionados con la falta de agua o el saneamiento. "Sólo con lograr que se laven las manos con jabón, reduciríamos en un 48% las enfermedades diarreicas", añade.
"Euskadi es un buen ejemplo de cómo se puede revertir el daño"
"España debería tener también su propia Agencia del Agua"
Fernández-Jáuregui recuerda que Naciones Unidas hizo un informe en 2003 que seleccionó al País Vasco como caso de estudio. "Euskadi es un ejemplo en el mundo de cómo se puede revertir el daño en una zona contaminada". "Ver a la gente pescar en la Ría es el mejor ejemplo de ello", dice refiriéndose a una comunidad autónoma que ha reducido su consumo de agua en un 18%. Para él, descentralización implica participación de la comunidad. "Y todo lo que vaya en ese sentido lo apoyamos". Señala que la nueva Agencia Vasca del Agua "ha nacido con muy buenas bases. Saben lo que tienen que hacer. Cuentan con los recursos humanos adecuados y la experiencia" acumulada de su antecesora, la Dirección de Agua del Departamento de Medio Ambiente.
La nueva agencia nació para acabar con las cíclicas pugnas entre instituciones que ansiaban llevarse el agua al cesto de sus competencias. Tras apenas dos meses y medio de andadura, ya recibe elogios por parte del representante de la ONU, que la pone de ejemplo a seguir.
"Los ríos dividían territorios, las cuencas los unen. El recurso hídrico tiene que ser gestionado por cuencas, de forma técnica. Y en las cuencas interautonómicas, hará falta una institución por encima de ellas. Tiene que haber una Agencia Española del Agua", sugiere, para reemplazar a la actual Dirección General de Aguas dependiente del Ministerio de Medio Ambiente. Al ser preguntado sobre el proyecto del trasvase del Ebro impulsado por el Partido Popular, responde lo siguiente: "En la ONU pensamos que el tema de la gestión del agua tiene que ser estrategia de Estado, no de un partido político".
- ¿Está a favor o en contra?
- No lo conozco en detalle, pero un plan en el que no participó la sociedad a la hora de elaborarse tiene poca representación. Hay que consultar a la comunidad y privilegiar el largo plazo para convertirlo en una estrategia de Estado y no en la plataforma de algún gobierno.
- O de la oposición.
- Exactamente.
Según sus cálculos, en la Unión Europea hay ochenta millones de personas que tienen problemas de acceso a infraestructuras sanitarias adecuadas. "Sobre todo en zonas rurales dispersas", explica. Asia es la zona del planeta más perjudicada, porque cuenta "con el 60% de la población y sólo el 36% de los recursos hídricos". "No es negociable que los servicios básicos sean deficientes. Todo debe estar centrado en lo humano", resume.
Fernández-Jáuregui no cree que habrá guerras entre países por el agua en un futuro, pero sí vaticina "más conflictos sociales y más migraciones de zonas pobres a las más ricas".
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