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ELECCIONES 2008 | Los resultados en Cataluña

El PP madrileño culpa a Sirera de la derrota de Mariano Rajoy

Los populares catalanes evitan la autocrítica tras el fracaso electoral

El Partido Popular catalán no ha hecho los deberes en esta campaña. No ha cumplido las expectativas a ojos de la dirección nacional. Tanto que desde la calle de Génova culpan a la delegación que preside Daniel Sirera de la derrota estatal del PP y de que Mariano Rajoy no sea el presidente. Ningún motivo explica, a juicio de los dirigentes madrileños, la gran diferencia entre populares y socialistas en Cataluña: 18 diputados, un escollo insalvable para las opciones de Rajoy.

Francisco Granados, secretario general del PP de Madrid, achacó ayer la "victoria clara del PSOE" al "mal resultado" del partido en Cataluña. Acomodado en el buen papel de su federación, que rozó el 50% de los votos en Madrid, Granados se apresuró a reñir a sus compañeros: "No hemos sabido explicar nuestra idea de España y no hemos sabido vencer la teoría de la izquierda, que dice que somos anticatalanes", aleccionó. Granados instó al PP catalán a "replantear" su campaña para, en el futuro, reducir la distancia con el PSC.

Pese a que habitualmente Sirera obedece a pies juntillas cualquier postulado proveniente de Madrid, ayer por la tarde hizo caso omiso de las peticiones de Granados y reiteró la lectura positiva que, por la mañana, tras la reunión de la ejecutiva del partido, había hecho de los resultados. "El PP ha crecido y obtiene los mismos diputados que hicieron presidente a José María Aznar en 1996", celebró Sirera, dando por sentado que los populares tendrán ocho escaños en Cataluña, dos más que en 2004. A falta de escrutar el voto procedente del extranjero, CiU tiene el último diputado en Barcelona, por lo que el PP se quedaría en siete. Por si fuera poco, el presidente del PP catalán omitió la diferencia con el PSC en los comicios de 1996: los socialistas le sacaron entonces 11 escaños de ventaja a los conservadores.

El optimismo de Sirera fue afeado por algunos miembros del PP catalán. El número dos por Barcelona, Jorge Fernández, llamó a la "autocrítica" en la delegación regional. Fernández, que luchó hasta el último minuto para ser cabeza de lista por Barcelona, ha hecho campaña alejado de Dolors Nadal, elegida finalmente por Sirera para encabezar la candidatura. Visto el fracaso de Nadal, Fernández aprovechó para pedir "una profunda reflexión interna".

Fue más lejos Francesc Vendrell, diputado del PP en el Parlament. Vendrell, apartado de la dirección del partido tras la marcha de Josep Piqué. En declaraciones a RAC 1 instó a Rajoy a "hacer dimitir a unos cuantos. El PP catalán no entiende a Cataluña", concluyó.

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