La derecha se recupera en Francia, según los sondeos

La derrota de las tropas del presidente Nicolas Sarkozy en las elecciones municipales en Francia, cuya primera vuelta tendrá lugar mañana, podría no ser tan dolorosa como parecía augurar la caída en los sondeos del inquilino del Elíseo. La pérdida de popularidad de Sarkozy amenazaba con arrastrar a una catástrofe sin paliativos a los candidatos de la Unión por un Movimiento Popular (UMP). La entrada en campaña del muy popular primer ministro, François Fillon, parece haber frenado la caída.

El sondeo de CSA Dexia hecho público ayer indicaba que el 44% de los electores de las ciudades de más de 3.500 habitantes tienen la intención de votar a las listas de la izquierda frente a un 41% para la derecha, lo que supone que en una semana se ha producido una bajada de un punto para los candidatos de socialistas y aliados, y una subida de dos puntos para los de UMP. Los centristas de MoDem recogerían un 7% y la extrema izquierda y el Frente Nacional un 2% cada uno. El mismo sondeo apunta un 32% de abstención.

Las últimas encuestas auguran un triunfo de la izquierda en París, Rennes, Lille, Lyon y Estrasburgo. El resultado en Toulouse y Marsella, actualmente gobernadas por la UMP, es más indeciso. En el gran puerto mediterráneo, los sondeos muestran que el actual alcalde, Jean-Claude Gaudin, obtendría un 43% en la primera vuelta, sólo tres puntos más que el socialista Jean-Noël Guérini.

Delanoë, favorito

En París, el alcalde, el socialista Bertrand Delanoë, es ampliamente favorito para conservar su puesto. La lista del PS, según CSA, superaría en 11 puntos a la de su contrincante conservadora Françoise de Panafieu en la primera vuelta, y la batiría en la segunda por un 57% contra un 43%. La derecha aprieta en el distrito 12 de la capital, donde ha colocado a Jean Marie Cavada, periodista y hombre de televisión, ex compañero de viaje del centrista François Bayrou, pero que no parece poder detener a Delanoë.

Bayrou, por su parte, se la juega en su feudo pirenaico de Pau, donde las encuestas apuntan a una segunda vuelta a tres bandas, que probablemente forzará al líder centrista a un pacto en otras localidades para salvaguardar la emblemática alcaldía. El sistema electoral a dos vueltas hace que todas las previsiones queden supeditadas a los pactos que se establecerán el lunes, una vez que los partidos negocien, ciudad por ciudad, la retirada de su candidato o el apoyo a determinada lista a cambio de concesiones similares en otras localidades.