Las agencias de viajes empiezan a resentirse por la desaceleración
El sector facturó el 6,2% más en 2007, pero espera crecer el 4,5% este año
La desaceleración económica ya ha empezado a hacer mella en las agencias de viajes catalanas. La actividad arrancó en 2007 con garra, pero se tornó anodina a la vuelta de las vacaciones de verano. "Fue un año correcto", afirma el presidente de la Asociación Catalana de Agencias de Viajes (ACAV), Francesc Carnerero. La facturación media del sector creció el 6,2% respecto al año anterior.
El incremento es bastante inferior al que experimentó en 2006, de entre el 8% y el 9%, aunque mejor que las previsiones de las agencias para este año, que apuntan a un incremento del 4,5%.
La incertidumbre que empezó a aflorar a raíz de la crisis financiera influyó en los viajes que realizan los catalanes. Carnerero recordó que los créditos se encarecían, la desconfianza se instalaba en el consumidor y éste, además, percibía un clima de desaceleración. Pero esta situación no influyó tanto en la cantidad de viajes como en la calidad. "El cliente evalúa mucho más lo que vale el viaje, busca el mejor precio garantizado. Nuestras reservas aumentaron, pero descendió el número de días que los consumidores decidían pasar fuera", aseguró el vicepresidente de la entidad, Jordi Guri.
La incertidumbre en las economías mundiales no tuvo apenas repercusiones, sostiene la ACAV, en los viajes de congresos, que crecieron un 16% respecto al año anterior. Este incremento se explica porque, a juicio de Carnerero, este turismo "no está tan sujeto a la economía doméstica" como el de vacaciones. Los agentes de viajes consideran que podrán sobrellevar la moderación del crecimiento económico si potencian este segmento de mercado y el turismo de larga distancia.
Otra apuesta del sector es irse reconvirtiendo en "consultores turísticos". Es decir, que además de buscar billetes, alojamiento y excursiones, también se tratará de gestionar cualquier incidencia que pueda tener el cliente. La gerente de ACAV, Marian Muro, dio como ejemplo la defensa del cliente en los casos de overbooking o pérdida de equipajes, que podrían resolverse mientras el cliente está en el lugar de destino.
La asociación ahora está preparando un informe sobre los incumplimientos más frecuentes de las compañías aéreas, como la recolocación en otro vuelo o la compensación de un cliente que no puede hacer escala si el primer avión llega tarde o si hay un exceso de pasajeros.
Capital catalán para Spanair
La Asociación Catalana de Agencias de Viajes (ACAV) opina que la venta de Spanair por parte del grupo escandinavo SAS puede suponer una "amenaza" para el desarrollo del aeropuerto de Barcelona. Pero toda amenaza puede ser también una oportunidad, en este caso, para el capital catalán. El presidente de ACAV, Francesc Carnerero, abogó por "despolitizar" el debate sobre el aeropuerto y animó al empresariado catalán y a las entidades financieras que entren en el accionariado de Spanair para potenciar El Prat.
Carnerero aseguró que Barcelona está bien conectada con Europa. Sin embargo, afirmó que ahora El Prat debe crecer en vuelos transoceánicos, en especial a Norteamérica y Asia. El presidente de ACAV afirmó ser "optimista" respecto a que Iberia, en el caso de hacerse con Spanair, apueste por Barcelona. Aun así, señaló que Iberia "no ha creído" en la rentabilidad de los vuelos entre Barcelona y Estados Unidos. Y eso a pesar de que compañías como Air France vende billetes para estos viajes porque opera junto con Delta Airlines. Carnerero remachó que es necesaria una "bipolarización" entre Madrid y Barcelona para que ambas ciudades dispongan de vuelos de largo recorrido.
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