Un lustro mágico
Las compañías cotizadas ganaron un 12,1% más en 2007. Se trata del quinto año consecutivo de resultados récord.
Los últimos cinco años han supuesto un periodo extraordinariamente fructífero y, al mismo tiempo, revolucionario para las compañías cotizadas españolas. Fructífero porque durante este quinquenio los resultados han batido, año tras año, su récord. Y revolucionario porque se ha transformado el patrón de crecimiento gracias a la expansión internacional de las compañías. Si en 2003 el 65% de la facturación de las empresas del Ibex 35 se generaba en España, en 2007 el mercado interior apenas aportaba el 52% de la cifra de negocio. La formación de auténticas multinacionales ha sido posible gracias a unos niveles de endeudamiento también históricos. Como consecuencia de todos los factores anteriores, la plantilla conjunta de las sociedades con presencia en Bolsa ha alcanzado niveles jamás vistos con más de 1,5 millones de trabajadores.
La deuda financiera de las empresas del Ibex 35 es de 223.754 millones de euros y supone el 40% de la capitalización del índice
La previsión que maneja el consenso de mercado es que el beneficio neto de las compañías del Ibex 35 retroceda un 1,5% en 2008
Si en 2003 la facturación exterior sólo suponía el 35% del total, en la actualidad, los mercados internacionales aportan el 48% de las ventas
La guinda del pastel
En 2007 las empresas incluidas en el mercado continuo de la Bolsa de Madrid vendieron por valor de 434.363 millones de euros, un 18,9% más; el resultado de explotación conjunto mejoró un 25% hasta los 84.439 millones, mientras que el beneficio neto creció un 12,1% hasta los 55.736 millones. A pesar de estas grandes cifras, lo cierto es que se empieza a notar una cierta desaceleración en el ritmo de mejora de las ganancias. De hecho, éstas crecieron el doble en 2006 (un 24,7%) que en el pasado ejercicio. Además, dentro del Ibex 35 las ganancias del cuarto trimestre se contrajeron un 17%.
Las cuentas de las grandes empresas se comportaron mejor en 2007 que las de menor tamaño. Así, mientras los beneficios de las compañías incluidas en el índice selectivo aumentaron un 14,9%, el resultado neto del resto de miembros del mercado continuo retrocedió un 4,5% el pasado año.
Telefónica ha superado a Repsol como la compañía española con mayores ventas. La operadora alcanzó una facturación en 2007 de 56.440 millones (un 6,6% más), impulsada por el tirón de las filiales latinoamericanas y el negocio de la banda ancha. Por su parte, la petrolera sólo mejoró su cifra de negocio un 1,4%, hasta los 53.865 millones.
En el apartado de las ganancias, Santander mantuvo en 2007 su liderazgo aunque se estrecha la diferencia con respecto al segundo. El banco obtuvo un beneficio neto de 9.060 millones (un 19,2% más). En estas ganancias se incluyen 950 millones de plusvalías realizadas por la venta de una serie de activos. Sin ellas, el beneficio es de 8.111 millones. El segundo puesto en ganancias fue para Telefónica (8.906 millones). Al igual que ocurre con el Santander, las cuentas de las telecos también se han visto impulsadas por las plusvalías generadas con las ventas de Airwave y Endemol (2.664 millones entre ambas). BBVA cierra el podio por beneficios con 6.126 millones.
En el capítulo de las pérdidas, la palma se la lleva Jazztel. La compañía estuvo a punto de alcanzar la rentabilidad operativa en 2007, pero su resultado neto fue negativo por valor de 102 millones, cuando sus gestores habían anunciado unas pérdidas de entre 80 y 90 millones. A la operadora le sigue Vueling, que multiplicó casi por 11 veces sus pérdidas (81,3 millones). La aerolínea se vio lastrada por el incremento de los costes del combustible y la guerra de tarifas que se ha desatado en el sector. En tercer lugar, en el capítulo de números rojos, se sitúa Zeltia con 45 millones. Las cuentas de la empresa gallega no consiguen despegar a pesar de que se ha aprobado la comercialización de su fármaco estrella.
La deuda sigue creciendo
A pesar de que tras el estallido de la crisis inmobiliaria estadounidense ya no es tan fácil conseguir dinero con el que financiar los planes de expansión, las compañías españolas siguen endeudándose para crecer. Durante el pasado ejercicio, el endeudamiento financiero neto de las sociedades incluidas en el Ibex 35 aumentó un 11,38%. Al cierre de 2007, los compromisos conjuntos alcanzaban los 223.754 millones, cantidad que equivale al 40% de la capitalización del índice selectivo. Entre las compañías que más aumentaron su deuda se encuentran Acciona, ACS, FCC Iberdrola y su filial de energías renovables. Por su parte, las empresas que más aligeraron sus balances fueron Acerinox, Repsol, Telefónica, Sogecable, Ferrovial y Gamesa.
La expansión internacional emprendida por las compañías españolas en el último quinquenio ha dado la vuelta a la composición geográfica de los ingresos. Si al cierre del ejercicio 2003 las compañías del Ibex 35 generaban el 65% de sus ventas en España, en la actualidad éstas apenas suponen el 52% del total. Es bastante probable que a lo largo de 2008 la cifra de negocio exterior supere a la del mercado interior. Además, en este proceso de apertura a otros países también hay otra novedad importante: se dice adiós al monocultivo latinoamericano de finales de los años noventa del pasado siglo, para adentrase en otras áreas. En la actualidad, el 17% de las ventas procede de países de la Unión Europa, el 7,96% de Estados miembros de la OCDE (México y Estados Unidos, sobre todo) y el 23% de otros países (fundamentalmente latinoamericanos).
Visiones contrapuestas
¿Qué pasará con las cuentas empresariales en 2008? Existen dos visiones bastante opuestas: el optimismo de los directivos contrasta con el pesimismo (o más bien cautela) de los analistas. El consenso de mercado recopilado por la consultora Facset prevé que los beneficios de las compañías del Ibex 35 sean de 48.466 millones en el presente curso. De cumplirse estas estimaciones, los resultados retrocederían un 1,5%. Sería la primera caída en cinco años.
Sin embargo, los empresarios se muestran mucho más confiados y auguran otro año récord de ganancias. El presidente de Telefónica, César Alierta, ha señalado que los ingresos de la compañía crecerán entre un 6% y un 8% en 2008, con un alza del 7,5% al 11% en el beneficio bruto de explotación (Ebitda) y del 13% al 19% en el beneficio operativo. "No vemos ningún inconveniente para cumplir lo prometido", señaló ante los periodistas en una conferencia de prensa.
En el caso de los dos grandes bancos, el optimismo es la nota predominante a pesar de las dificultades que vive el sector tras la crisis de las subprime. Emilio Botín, presidente del Banco Santander, mandó un mensaje a los mercados: su objetivo es que los títulos del banco cierren el año en 16 euros (ahora cotizan a 11,93). Y para ello tiene que acompañar los resultados. Botín espera que el beneficio por acción del banco en 2008 crezca "al menos" un 15% en 2008 y 2009. Por su parte, su gran rival, el BBVA, también se muestra esperanzado. Su presidente, Francisco González, aprovechó la última presentación de resultados para confirmar los objetivos fijados en su plan estratégico hasta 2010 y aseguró tener liquidez suficiente "como para no tener que acudir a los mercados hasta 2009".
Otra compañía que ha presentado ambiciosos objetivos es Repsol. El plan estratégico de la petrolera incluye la inversión de 32.800 millones hasta 2012. Además, su presidente, Antonio Brufau, ha prometido al mercado triplicar el beneficio neto en los próximos cuatro años, exceptuando extraordinarios, duplicar el resultado operativo y repartir 15.000 millones de euros de dividendo en este periodo.
¿Quién tendrá razón, los analistas o los empresarios? Sólo el tiempo lo dirá. Atentos.
Las plantillas aumentan en 130.000 trabajadores
Aunque la economía española empieza a dar muestras de desaceleración, lo que se ha traducido en un repunte del paro en los últimos meses, las grandes compañías cotizadas siguen aumentando sus plantillas. Al cierre del ejercicio 2007, las empresas incluidas en el Ibex 35 contaban con 1.235.239 millones de trabajadores. Esta cantidad supone un incremento de 129.742 personas en un año. Eso sí, en el último trimestre, las plantillas tan sólo aumentaron en 7.877 empleados y hasta siete sociedades incluidas en el índice selectivo recortaron el tamaño de sus nóminas.
El considerable salto de tamaño dado por las empresas españolas en los últimos cinco años, debido a la compra de otras sociedades pero también al fuerte crecimiento orgánico, ha tenido como consecuencia la creación de cinco gigantes con más de 100.000 empleados. En la actualidad, la plantilla más numerosa es la de Telefónica. La operadora cuenta con 244.000 trabajadores (incluyendo las cifras de Atento, su filial de atención telefónica). Tras la teleco se sitúan ACS (142.000 empleados), Banco Santander (131.000), BBVA (104.000) y Ferrovial (102.000). Previsiblemente, FCC se unirá en los próximos meses a este selecto club ya que al cierre del ejercicio 2007 acumula una plantilla de 96.100 empleados.
Durante el pasado año, dentro del selectivo español, tan sólo redujeron sus plantillas tres compañías: Criteria, Iberia y Sogecable.
Del resto del mercado continuo aún no se disponen de datos globales. El plazo legal para presentar resultados termina el próximo lunes 3 de marzo y todavía hay una veintena de sociedades que faltan por comunicar sus cifras. Sin embargo, con las compañías que ya han rendido cuentas ante la CNMV, también se observa una tendencia al alza en las plantillas. Este grupo de medianas y pequeñas empresas cerraron 2007 con 201.404 trabajadores, 26.426 personas más que un año antes. En total, el número de personas a las que dan empleo las empresas cotizadas españolas ronda ya el millón y medio.
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