La segunda voz de Labordeta
Bizén Fuster es el candidato número 1 al Congreso de Chunta Aragonesista por Zaragoza. De número dos va José Antonio Labordeta, el diputado que durante cuatro años ha sido "la voz de Aragón" en el Congreso, como pregona su formación. Fuster, que nació hace 48 años en el pueblo oscense de Naval, defiende a capa y espada la necesidad de mantener e incluso de aumentar la presencia en la Cámara de la Chunta, porque sólo con un diputado, Labordeta, "se han logrado cien millones de euros en inversiones en Aragón" y porque "hay otros 26 aragoneses que no se han dejado notar".
Fuster argumenta que ellos son un doble voto útil. "Seremos la representación de los aragoneses que no eligen entre Zapatero y Rajoy, sino a sus representantes, y, además, la garantía de un gobierno de izquierdas porque nunca irá nuestro voto a un candidato del PP. Votaremos a un presidente de izquierda a cambio de acuerdos".
El candidato Bizén Fuster sabe que el duelo se presenta difícil. Pero está acostumbrado a luchar. Fuster no rebla. Fue uno de los fundadores de Chunta hace 25 años. Creó el partido con un grupo de amigos, los mismos con los que suele salir al monte y con los que disfruta, más comiendo que cogiendo, de las setas. Tiene dos hijos con nombres aragoneses (Alodia y Lorien), le encanta el cine de romanos y el histórico. Es licenciado en Geografía e Historia, diplomado en Ciencias Políticas. Tras ser diputado en las Cortes Aragonesas desde 1999, ahora sueña con llegar al Congreso. "Somos el único partido que garantiza que no se haga el trasvase del Ebro y nos tememos que, si hay mayorías absolutas, resucite la idea porque en Aragón somos 13 diputados y en Levante más de 50 y hay que recordar que, los dos intentos de trasvase fueron con esas mayorías".
Fuster defiende la opción nacionalista de su partido. "Somos federalistas y un contrapunto a los nacionalismos extremos de la periferia y el centro. Por cierto, el de Madrid es el peor". Reclama la deuda de 20.000 millones de euros con Aragón y lo ha escenificado en campaña con cheques gigantes paseados por las calles. "Nos deben ese dinero por dejarnos fuera de los fondos [de la UE] del objetivo 1, por los años de retrasos en las inversiones. Además", añade, "cometimos la torpeza de no incluir cláusulas en el Estatuto que atasen inversiones como han hecho otras comunidades".
Ahora Fuster confía en que los electores que se quedaron en casa y no les votaron en las pasadas autonómicas y municipales salgan a darles de nuevo su confianza "Aragón necesita tener esa voz en el Congreso. Labordeta ha demostrado que es rentable".
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