El Rey se interesó ante Narbona por la ley que limita la caza con plomo
Zarzuela justifica la actuación del Monarca por su relación con la naturaleza
El Rey preguntó al Gobierno por la tramitación de la Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad, la norma que limita la caza con perdigones de plomo y que ha servido de excusa a la Federación de Caza para manifestarse contra el Gobierno el próximo sábado en Madrid. Lo confirmó ayer la Casa del Rey. "Don Juan Carlos se ha interesado" por su desarrollo. "El Rey es cazador, pero también es un gran defensor del medio ambiente y en este sentido ha sido su preocupación", precisó un portavoz.
El Monarca, que sale a cazar a menudo, terció ante la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, para conocer el contenido de la ley durante su tramitación parlamentaria, según fuentes próximas a la negociación. Recibió las pertinentes explicaciones por parte del Gobierno, y, después de que la Federación de Caza convocase la marcha a una semana de las elecciones, se distanció del tema. Cree que "no se debe mezclar caza y política", según fuentes próximas al Monarca.
El Rey también quiso pulsar la opinión de la industria de armas y contactó con distintos agentes. Siempre, según un portavoz de la Casa del Rey, para propiciar que las municiones sean respetuosas con el medio ambiente. "Lo que hace en estos casos es interesarse por la situación y recabar información de todos los sectores".
El interés del Rey coincidió con la protesta que los cazadores han convocado el próximo sábado en Madrid. El detonante de la protesta es la Ley de Biodiversidad, que amplía la prohibición de usar perdigones de plomo a todos los humedales protegidos. Pero es también una movilización para protestar por la dispersión normativa y los supuestos ataques contra la caza por parte de las administraciones. Medio Ambiente se defiende y recuerda que esta norma no cambia la existente en materia de expropiaciones de cotos -uno de los argumentos de los convocantes- y que la mayoría de las competencias en materia de caza están en manos de las comunidades autónomas. Pero la fecha, a una semana de las elecciones, y la gran afluencia prevista -hay 600.000 federados, la marcha coincide con la Feria Internacional de la Caza y los convocantes esperan decenas de miles de manifestantes-, han disparado las alarmas en el Gobierno.
En el palacio de la Zarzuela se siguen con mucho interés los temas ambientales. El monarca defiende medidas contra el cambio climático, según fuentes de la Casa Real, y ha criticado el desarrollo urbanístico feroz del litoral murciano tras sobrevolar en avión la zona; doña Sofía se ocupa personalmente de que se recicle en la Zarzuela todo lo posible, y hace dos meses promovió la construcción de una cubierta ecológica en sus oficinas. La Reina no practica la caza, no le gustan los toros y no come carne.
No así el Príncipe, declarado ecologista, que comparte la afición de su padre por la caza. En declaraciones a EL PAÍS con motivo del 40 cumpleaños de don Felipe, Carlos Martínez, presidente de Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CISC), explicó que en más de una ocasión tanto el Rey como el Príncipe le habían preguntado: "¿Cuándo vamos a conseguir unos cartuchos biodegradables para evitar contaminar?".
Los perdigones de plomo de los cartuchos se acumulan en el campo y en los humedales, de forma que las aves las confunden con los guijarros que utilizan para moler el alimento, así que los ingieren. Decenas de miles mueren por esta causa al año, según explica Rafael Mateo, del Instituto de Recursos Cinegéticos del CSIC. En humedales como el Delta del Ebro se han llegado a contar tres millones de perdigones de plomo por hectárea.
La contaminación por plomo fue uno de los asuntos que más preocupó a la Casa del Rey cuando Madrid 2012 presentó su proyecto de candidatura olímpica, aspecto examinado por los responsables del Comité Olímpico Internacional (COI).
La gran marcha del sábado es un viejo proyecto de un grupo de líderes del sector, que desde hace años querían demostrar que la caza no afecta "sólo a cuatro señoritos". Al acto se ha sumado la organización agraria Asaja, próxima al PP, pero se ha desmarcado la Federación de Caza de Aragón, que considera que la protesta no está justificada.
El presidente de la Federación de Caza, Andrés Gutiérrez, niega que tras la movilización exista ningún interés político pero sí señala que don Juan Carlos ha mostrado interés por cómo afectará la ley a la caza. Ante las acusaciones de partidismo, los cazadores anuncian otra marcha para dentro de seis meses.
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