Fallece Dolors Lafitte, voz de la cara clásica de la Cançó

La cantante Dolors Lafitte falleció el pasado viernes a los 59 años en el Hospital Josep Trueta de Girona. Fue una sorpresa, ya que seguía al pie del cañón no sólo en el aspecto artístico (en diciembre participó en el ciclo de música medieval Llum al romànic), sino también en el humano y militante, tras escribir la canción Txernòbil, mai més y porque se presentaba como número dos en las listas gerundenses del partido Els Verds-Alternativa Verda en las próximas elecciones. Hoy se incinerará su cuerpo en la intimidad familiar y el miércoles, a las cuatro de la tarde, se realizará en Santa Maria de Porqueres (Pla de l'Estany) un acto público en su memoria.

Lafitte (Roda de Ter, 1949) había comenzado su carrera a rebufo de la Nova Cançó en 1964 en las recordadas sesiones de La Cova del Drac barcelonesa y, sin haber obtenido nunca grandes éxitos populares, mantuvo siempre alto el estandarte de una canción realizada con honestidad y de un estudio del folclor riguroso y, al mismo tiempo, lúdico.

En 1968 publicó su primer disco EP dedicado al folclor occitano en la recordada Concèntric y ese mismo año conseguía el segundo premio en el Festival del Mediterráneo compartiendo con Lluís Llach la canción A cara o creu. Posteriormente, su trabajo se dividió entre las traducciones de cantantes franceses y las variedades (se recuerdan su Varietet de varietats, su Hello Dolors y el Bestiari, de Pere Quart) sin dejar nunca de lado el folclor. En ese campo fueron importantes sus discos con La Corranda y posteriormente la creación de Els Trobadors junto con Alfons Encinas. También con Encinas montó el grupo de animación infantil El Arc en el cel, con el que acercaban las músicas tradicionales catalana y occitana a los más pequeños.

En los últimos años, Lafitte, que había cambiado su nombre por el de Maria por considerar que Dolors era demasiado triste, se había centrado en el estudio de la música medieval y la lucha ecologista.