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Cibeles vuelve por sus fueros

Los desfiles retornan al escenario de Ifema - Las referencias soviéticas y la polémica por las tallas que nunca cesa marcan la jornada inaugural

"Se echan en falta los árboles y los descansos al aire libre entre desfile y desfile", decía ayer rotunda Marina Pérez, de 23 años, una de las modelos españolas de mayor poyección y, sobre todo, una de las chicas que participaron, previo examen antropométrico, en la jornada inaugural de la 47ª edición de la Pasarela Cibeles.

Cinco días de nervios y toneladas de laca en los que 37 diseñadores presentarán sus colecciones en 33 desfiles. Si en las pasadas ediciones lo más comentado entre público, prensa y asistentes fue el examen del índice de masa corporal de las maniquíes, en esta edición las quejas se centran en la vuelta de la cita a la Feria de Madrid.

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Baja intensidad

Otro de los temas estrellas escuchados ayer en corrillos, stands de revistas de moda o entre una botellita de champán y otra fue la venida de los modistos catalanes, que desembarca el viernes en la figura de Josep Abril tras la defunción de la Pasarela Gaudí. Un desfile excepcional en sí mismo: por barcelonés su creador y por hombres, los destinatarios de sus prendas. En la cita son mayoría los modistos enfocados en las mujeres. "Cibeles quiere abrirse con creadores como Abril a la moda masculina", afirma Cuca Solana, presidenta de la pasarela.

Si en la veterana Agatha Ruiz de la Prada estuvieron "los peinados más espectaculares", según Virginia Melón, peluquera de L'Oréal, empresa patrocinadora, los tupés barrocos de las modelos del madrileño Juan Duyos apuntaron alto. "Partí del triángulo, el cuadrado y el círculo; y claro, espontáneamente surgió una línea muy Malevich", explicaba después del desfile el creador de 39 años. A su alrededor, sus colaboradores se afanaban en recoger perchas y alfileres y en guardar zapatos y botines en decenas de cajas. Los complementos, en especial el calzado, atrajeron la atención de los asistentes. "Una auténtica delicia", aseguraba Elvira Lindo entre una barahúnda de curiosos, invitados y periodistas. "Los encargamos a una empresa de Elda. Mezclan ante y charol y se basan en tacones rectangulares, cuadrados y triangulares", especificaba con un alfiler dorado recién regalado por la cantante Bebe. "Una pena que Bebe haya llegado tarde al desfile", se lamentaba Duyos. "Todo se debe a lo lejos que está Ifema. Yo prefería el Retiro".

Entre tanta queja, una posible explicación. El cambio de ubicación de Cibeles, celebrada en las últimas cuatro ediciones en el céntrico parque, se podría deber, decían, a las presiones de patinadores. "Eso es una sandez", desmentía Solana, mientras se fumaba un cigarro y se cambiaba de zapatos en la oficina de la organización. "Éste es el año de la creación en Ifema. Coincidimos con Arco, Iberjoya y Casa Pasarela. Es el escenario perfecto. Veremos qué pasa en septiembre". El doble de invitados y de prensa en comparación con los días del Retiro son las bazas de haber emigrado lejos del parque.

Mientras tanto, un perro enano de collar rosa correteaba entre las piernas interminables de Leah de Wavurin, su dueña. "En Francia sería impensable que nos hicieran un examen de la masa corporal como en España. Los creadores son los que pagan. A mí, de todos modos, no me parece mala idea".

La actriz Maite Nieto, con traje de novia y bebé vestido a juego de la colección de Jesús del Pozo.
La actriz Maite Nieto, con traje de novia y bebé vestido a juego de la colección de Jesús del Pozo.EFE

La tendencia: El juego de las muñecas rusas

Desde las gorras suprematistas de Juan Duyos, hasta los vestidos inspirados en las zarinas rusas de Victorio & Lucchino. Rusia tomó ayer Cibeles a través de los sombreros de círculos, rectángulos y cuadrados de Duyos, y de los vestidos de tejidos y grosores similares a los trajes de las zarinas rusas de la pareja de diseñadores sevillanos. En Lemoniez, con sus trajes de líneas rectas, recordó cierta elegancia esteparia.

La cara del día: Caroline Winberg pasó la prueba

La modelo sueca Caroline Winberg, una de las tops indiscutibles del mundo, fue ayer centro de las miradas. Con 1,80 metros y 22 años de edad, en 2002 captó la atención de la prensa del corazón por un supuesto romance con el cantante de Rolling Stones, Mick Jagger. Ha aprecido en diversas ediciones de Vogue, ha desfilado para Alexander McQueen y hoy lo hará con Roberto Torretta (16.00) y Miguel Palacio (20.00).

Un plan para hoy: Hugo Silva, chico calendario

Es, tradicionalmente, la fiesta de la semana. El madrileño hotel Palace acoge, a las 21.00, una fiesta privada donde se presentará el calendario de la moda de Larios. La novedad: la presencia del actor Hugo Silva, que será el chico de diciembre. Hasta las 3.00, modelos, fotógrafos y famosos, con invitación, claro. "Será la fiesta más divertida del año", aseguran desde Globaly, organizadores del evento. ¿Qué otra cosa iban a decir?

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