Varón, de clase media y conservador

La Encuesta de Confianza realizada por JPMorgan Asset Management está dirigida al inversor particular y tiene como objetivo explicar sus hábitos de consumo de productos de inversión y ahorro (fondos, Bolsa, depósitos, etcétera). Cerca de nueve millones de españoles tienen ahorros invertidos en renta variable. De esta cifra, 3,5 millones de personas invierten directamente en el mercado, según un estudio dirigido en 2006 por José Juan Toharia y realizado por la Fundación de Estudios Sociológicos (Fundes). Así, puede considerarse pequeños accionistas al 10% de la población mayor de 18 años, el resto, hasta los nueve millones, acuden al mercado financiero por medio de distintas modalidades de fondos de inversión que incluyen alguna proporción de Bolsa en su cartera.

Hay poca diversificación geográfica. El 33% de los encuestados tiene más del 75% de su cartera en acciones de la Bolsa española

Los productos de mayor penetración en España son la libreta o cuenta de ahorro remunerada y los depósitos

El perfil del inversor español, según la encuesta JPMorgan Asset Management, es el de un hombre con una edad media de 51 años, casado, que vive en un hogar de dos miembros, donde él es el que más ingresos aporta y el que decide sobre los gastos. Además, pertenece a una clase social alta, media-alta. El mayor número de inversores se concentra en localidades con una población entre 10.000 y 50.000 habitantes.

Uno de los aspectos que más llama la atención del estudio es la baja penetración en nuestro país de los productos financieros, sobre todo si se compara con otros vecinos europeos. A la pregunta de si cuentan con productos financieros de ahorro e inversión, sólo el 25% reconoce tener algún producto.

"El inversor español es muy conservador", reconoce Javier Dorado, máximo responsable de JPMorgan Asset Management. Entre aquellos que reconocen tener productos financieros, la libreta o cuenta de ahorro con tipo de interés, los planes o fondos de pensiones y los depósitos a plazo fijo destacan como los activos con mayor penetración. Sólo el 9% de los encuestados asegura tener participaciones en un fondo de inversión, mientras que el 8% invierte directamente en renta variable.

Aparte de su conservadurismo, otro rasgo del inversor español es su preferencia por el mercado local. Entre aquellos ahorradores que disponían durante el cuarto trimestre de 2007 de acciones o fondos de inversión, seis de cada 10 tiene algo invertido en compañías del Ibex 35, el principal indicador de la Bolsa española, y un 33% tiene más del 75% de su cartera en este índice.

Este perfil local corrobora la última actualización del estudio que realiza periódicamente la Federación Europea de Bolsas (Fese) acerca de la estructura de la propiedad de acciones en el conjunto de Europa. Este análisis indica que los inversores individuales españoles tienen un 23,6% de la Bolsa española, frente al 14,7% que tienen de media en Europa. Aparte del caso español, únicamente hay otros tres países que tienen más de un 20% de participación de inversores individuales. "Existiendo pocas excepciones a esta tendencia, el efecto de los tres años de crisis en los mercados de valores durante el período 2000-2002 perdura a pesar de los siguientes años de recuperación", argumentan desde la patronal de Bolsas.