Cajasur achaca a la inestabilidad financiera los cambios de dirección

Cajasur se une a la fiebre de las cajas españolas por renovar a sus cúpulas directivas. En un consejo de administración extraordinario de la entidad cordobesa celebrado ayer se decidió cesar a José Antonio Arcenegui, director general. Su puesto lo ocupa ya Alfonso Tolcheff, quien fue durante 11 años consejero delegado del Banco Urquijo y quien hasta la fecha no tenía relación con la caja cordobesa.

El presidente de la entidad, el sacerdote Santiago Gómez Sierra, indicó ayer que las recientes turbulencias en los mercados financieros internacionales están tras el relevo. Lo que pretende Cajasur con esta incorporación es ganar más peso comercial para hacer frente a la "inestabilidad" del sector.

La caja ha tenido tres directores generales distintos en sólo diez meses. El primero en caer a finales de marzo de 2007 fue José Ruiz Ortiz, quien fue sustituido por Arcenegui. La caja vendió entonces este cambio y el resto de relevos en la cúpula directiva como un paso decisivo en el nuevo rumbo que había tomado la entidad después de los acuerdos entre la Iglesia y la Junta de Andalucía para la vuelta de la caja a la tutela autonómica.

Arcenegui también llegó a la dirección general en el mes de marzo pasado con una importante misión: subsanar las irregularidades detectadas por el Banco de España y achacables a la antigua cúpula directiva. El "alineamiento" con los criterios fijados por la "entidad supervisora" todavía no está rematado, dijo ayer Gómez Sierra. "Pero estamos llegando a la meta", añadió el sacerdote. Antes de ocupar el cargo de director general, Arcenegui trabajaba en el área de auditoría de la propia entidad y contaba con el visto bueno del Banco de España. Arcenegui seguirá trabajando en la caja cordobesa tras su cese.

Su relevo se ha producido repentinamente. "Desde marzo hasta ahora el escenario del sector financiero ha cambiado enormemente", dijo ayer Gómez Sierra. El sacerdote aludió a la crisis de las hipotecas basura en Estado Unidos, a la creciente desconfianza, a los problemas de liquidez en el sector y a la "ralentización del sector inmobiliario", que ha afectado directamente a las cajas andaluzas. Entre los cometidos principales de Tolcheff estará reactivar la línea comercial con nuevos productos financieros. También deberá intensificar las gestiones de control y reducción de la mora, según indicó Gómez Sierra. Además de este importante cambio, la caja anunció ayer que próximamente se nombrará a un ejecutivo también de fuera de la entidad consejero delegado para el grupo de empresas, una figura inexistente hasta la fecha.

La incorporación de Tolcheff no es la única novedad registrada en las cajas andaluzas recientemente. El pasado 11 de enero, el consejo de administración de Cajasol decidió sustituir también a su director general. Rafael López-Tarruella Martín, un directivo con experiencia en fusiones, fue el elegido para el cargo.

Y fuera de Andalucía las aguas tampoco están tranquilas. Caixa Catalunya también ha optado por renovarse y ha nombrado nuevo director general a Adolf Todó, quien sustituye a Josep Maria Loza.