El ex presidente mexicano Fox crea un centro pro democracia
Ayudar a consolidar la democracia y la libertad en México y América Latina, promover la economía de mercado y difundir la cultura de la región. Éstos son los principales objetivos del Centro Fox, una asociación civil sin ánimo de lucro que fue creada hace poco más de un año por el ex presidente mexicano Vicente Fox, que estos días busca apoyos en España para su proyecto.
"Por primera vez en mucho tiempo podemos hablar de una corriente democratizadora consolidada en América Latina que ha reducido la pobreza", afirmó ayer Fox durante una entrevista en Madrid, donde se ha reunido con representantes empresariales, entre ellos Ignacio Polanco y Juan Luis Cebrián, presidente y consejero delegado respectivamente de PRISA, grupo editor de EL PAÍS.
Fox, que está al frente del Centro Fox junto a su esposa, Marta Sahagún, quiere crear un consejo consultivo en España, formado por empresas, universidades, centros de análisis y escuelas de negocios. "Será un centro universal y abierto a todas las corrientes", añadió Fox.
El centro, con una inversión total de 18 millones de dólares (unos 13 millones de euros), tiene previsto empezar a poner en marcha sus actividades (centro de estudios, instituto de análisis, centro cultural y centro de documentación) en febrero.
Evitar regresiones
"Es importante promover los valores democráticos para evitar regresiones, como está pasando en algunos países", añadió. Preguntado acerca de cuáles son esos países, Fox dijo que prefería no mencionar países concretos. "Lo que me preocupa es el populismo y el mesianismo", manifestó. El ex dirigente sí puso como ejemplos a destacar en el lado positivo a Chile y México.
Vicente Fox, de 66 años, presidió México entre diciembre de 2000 y noviembre de 2006, y logró terminar con la hegemonía de 72 años del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Ahora, cuenta que se dedica a su familia, a pronunciar conferencias, a escribir libros y a impulsar este centro.
"Cuando dejé la presidencia, pensé en crear el centro, por inquietud personal", dijo Fox, que también se ha inspirado en la tradición de los ex presidentes de EE UU de crear bibliotecas cuando dejan el cargo. "Además, he querido sumarme a esta nueva y muy activa generación de ex dirigentes", añadió.
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