Eliminar el redondeo causará retrasos en los peajes de Guipúzcoa

La Diputación de Guipúzcoa ha dado por perdida la guerra de los céntimos que el año pasado le reportó pingües beneficios en los peajes de las autopistas A-8 (Bilbao-Behobia) y la AP-1 (Eibar-Vitoria). La institución foral ha decidido no recurrir la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que consideró "injustificado" el redondeo al alza que estaba aplicando a todos los conductores, y por lo que consiguió una recaudación extra de un millón de euros en 2007. A partir de ahora, no habrá redondeo en el cobro de las tarifas y, en principio, los pagos de los usuarios de las autopistas se ajustarán hasta el último céntimo, según anunció ayer el diputado de Infraestructuras Viarias, Eneko Goia. Esta nueva mecánica en los abonos, advirtió, repercutirá en una mayor lentitud en el cobro a los conductores, lo que podría provocar retrasos y retenciones en las cabinas de pago.

Con las nuevas tarifas se dejarán de ingresar 2,5 millones en 2008

En una comparecencia ante las Juntas Generales, Goia dio por cerrada la polémica suscitada por el redondeo al alza en las autopistas guipuzcoanas, que la Diputación venía aplicando por decreto en los últimos ejercicios. Un fallo del máximo tribunal vasco, conocida en diciembre pasado y que atendió una demanda interpuesta por la asociación Automovilistas Europeos Asociados (AEA), anuló el decreto que fijaba los precios de 2007. La Diputación considera "finiquitada" esta cuestión, por referirse a un ejercicio que ya está cerrado, y renuncia a presentar un recurso ante el Tribunal Supremo.

Como ya dejó entrever en una comparecencia reciente ante los periodistas, Goia confirmó que la Diputación no tiene la obligación de devolver a los usuarios de las autopistas el millón de euros que ha conseguido recaudar con esta fórmula. La dificultad técnica para calcular lo que le corresponde a cada conductor impide revertir las cantidades cobradas a favor de la institución foral. Los conductores, dijo, serán compensados con las tarifas que han sido aprobadas para 2008. En algunos tramos el coste será incluso unos céntimos inferior al que ha estado en vigor a lo largo de este ejercicio. "Hemos decidido actuar con total prudencia" y "sin salirnos un milímetro de los límites" que se establecen en la mencionada sentencia, manifestó el diputado.

Con las nuevas tarifas, sin el redondeo excesivo, este año se dejarán de ingresar 2,5 millones, calculó el director general de Bidegi, Borja Jauregi, quien advirtió de que esta merma económica acarreará una "menor capacidad inversora" de esta sociedad pública que gestiona las autopistas guipuzcoanas.

Los partidos de la oposición criticaron el proceder de la institución foral. Iñaki Arriola, del PSE, calificó de "miserable" la aplicación del redondeo y criticó que no haya intención de "resarcir" a los afectados. Iñigo Manrique, del PP, exigió el aumento del número de cabinas de pago automático para "agilizar" el paso de los vehículos y "evitar retenciones".

La juntera de Aralar Rebeka Ubera reiteró su apuesta por implantar en las autopistas de "una viñeta social que no penalice a los usuarios". Esta fórmula supone pagar una cuota fija que permite el uso de la vía durante un tiempo determinado.