"Ahora tenemos una identidad"

Fabio Cannavaro (Nápoles, 34 años) disfruta como un niño cuando habla de fútbol. Sólo se calla durante un minuto, cuando Van Nistelrooy irrumpe en la sala de las entrevistas cantando "Oh Fabio Oh Fabio, hoy tienes una entrevista". "Es un cachondo. Además, hace un corte de mangas y luego viene y te dice 'no sabía que causaría tanto revuelo", bromea. Como buen italiano tiene nostalgia de su tierra, pero Madrid es su segunda ciudad. "Lo que más me gusta son los horarios, igualitos a los de Nápoles". Ve a Casillas más tranquilo que el año pasado. "Sale más y grita menos".

Pregunta. Se ha convertido en uno de los pesos pesados del vestuario en tan sólo año y medio, ¿cómo lo ha conseguido?

"Capello te intimida, impone cuando hablas con él. Schuster te conquista"

"Raúl es el más italiano. Es un adicto al trabajo. Cuida hasta el mínimo detalle"

"No me esperaba la crisis del Barça, pero las estrellas rompen los equilibrios"

Respuesta. Con el trabajo. Si los jóvenes ven que los mayores se machacan trabajando a diario te siguen.

P. ¿Cómo se hace escuchar?

R. Las palabras sirven para explicar algo de táctica. Cuando era jovencito veía a los Ferrara, los Maldini, los Baresi que se entrenaban a tope, llegaban una hora antes que los demás y se iban una hora después. No hacían falta palabras para que los demás los escucháramos, a mí me bastaba ver cómo se entrenaban. Y yo hago lo mismo ahora.

P. ¿Quién es el más italiano del vestuario?

R. Raúl, porque es un adicto al trabajo. Tiene la cultura del profesional, del atleta. Cada día cuida hasta el mínimo detalle.

P. ¿Cómo ha vivido la resurrección de Raúl?

R. Con normalidad. Creo que su resurrección es un premio a su profesionalidad y depende exclusivamente de su rutina diaria. Siempre lo he visto entrenar con el mismo empeño y cuando alguien trabaja con seriedad, cuida su alimentación a diario y hace vida de deportista es normal que supere los momentos de bajón y vuelva a marcar 20 goles por temporada.

P. Robinho parece haber dado el salto este año. ¿Qué es lo que ha cambiado?

R. Ha madurado, se ha dado cuenta de que tiene una oportunidad importante. Además, Schuster ha sabido transmitirle la tranquilidad que necesitaba. El otro día bromeando le dije 'mira, si quieres ganar el Balón de Oro antes tienes que hacerme ganar la Champions y la Liga'. Para alcanzar la cima tienes que dar mucho y él lo ha entendido.

P. Es el único superviviente del clan Capello, ¿qué vio Schuster en usted?

R. Alguien al que le gusta trabajar y dar el máximo.

P. Desde el punto de vista del trato humano ¿en qué se diferencian Capello y Schuster?

R. Como decía Beckham, Capello te intimida, impone mucho cuando hablas con él. A ambos les gusta trabajar las cosas en el campo, han sido jugadores y saben cómo llevar al vestuario. Schuster es muy simpático, habla poco, pero las pocas veces que lo hace te conquista y sobretodo te dice las cosas apropiadas. Los jugadores somos presumidos y a veces cuando un técnico te dice algo piensas 'y este qué quiere'. Con Schuster no pasa, sabe hacerse escuchar.

P. Este Madrid parece imbatible, siempre consigue cerrar los partidos. ¿Qué es lo que tienen este año y no tenían el pasado?

R. La convicción de ser un equipo, de ser fuertes y de poder ganar en cualquier momento. Antes en los momentos difíciles esta convicción no existía y todo se venía abajo como un castillo de naipes. Este año hay una base muy sólida que saca pecho cuando aparecen las dificultades. Además, se ha fichado a jugadores con más calidad técnica.

P. ¿Cómo ha sido la transición del fútbol capelliano al de Schuster?

R. No ha sido demasiado dura. Este grupo ha mantenido lo bueno de Capello, que es que funcionamos como un equipo. Además, este año tenemos una ventaja, jugamos con defensas puros. Tenemos unos laterales, como se vio en el partido contra el Barça, que pueden tranquilamente jugar de centrales por la calidad que tienen. Eso a un equipo le complica menos las cosas.

P. Este año precisamente el Madrid ha vuelto a contar con una pareja estable de centrales.

R. Es pronto para decirlo. Para ello hacen falta un par de años. Creo que una defensa es fuerte cuando sus centrales se entienden de memoria, como me pasaba a mí con Thuram. Pero sí que las cosas ahora son mucho más fáciles porque tenemos una identidad. Da igual quién juegue porque da la sensación de que se hacen las cosas todos juntos.

P. ¿Se nota allí atrás eso de jugar con un sólo pivote?

R. No si corremos todos.

P. ¿Cómo se reparte el trabajo con Pepe?

R. Hablando mucho. Lo más importante es estar seguro de que si fallas, tienes a tu compañero allí atrás. Esto te permite ser más agresivo y anticiparte. Podemos salir los dos, con tal de que el otro se quede a cubrir.

P. ¿Qué lo que más le gusta de Pepe?

R. Que es joven. Ha vivido una situación muy delicada, sabe que se ha pagado mucho por él y la gente se espera mucho, pero tiene que empezar a gestionarse. Jugar todos los partidos al 150% no puede ser, porque acabas petando. Tiene que encontrar un equilibrio.

P. ¿Cree que en el fútbol español se aprecia a los defensas?

R. No mucho. Pero al final si un equipo empieza a ganar, a encajar menos goles, a cometer menos errores, la gente acaba apreciando a los buenos defensas. El jogo bonito les gusta a todos, pero lo importante en el fútbol es ganar.

P. ¿Qué es para usted un buen defensa?

R. El que mantiene la atención y la concentración durante 90 minutos además de ser fuerte físicamente.

P. Ahora le enseñen menos amarillas...

R. La temporada pasada no conseguía entender por qué me sacaban tantas, hacía faltas normalísimas... Este año he recuperado la condición física y cometo menos.

P. ¿Hay algún defensa que le guste especialmente?

R. Puyol por su forma de entender el fútbol.

P. ¿Se esperaba la crisis de juego del Barça?

R. Por los jugadores que había fichado, no. Pero, escuchando a los compañeros, cuando hay muchas estrellas como pasó aquí hace un par de años, se rompen los equilibrios. Aun así siguen siendo un equipo fuerte.

P. ¿Más rivales?

R. El Atlético tiene buenos jugadores y si encuentra continuidad nos puede crear problemas. Pero todo depende de nosotros.

P. ¿A principio de temporada se esperaban un rendimiento tan alto?

R. Sinceramente no, porque han llegado jugadores y un técnico nuevos. Hemos sido capaces de volver a crear un bloque compacto, los veteranos han sabido integrar a los jóvenes y el entrenador ha conseguido hacer jugar a todos. Son pequeños detalles que nos están permitiendo liderar la Liga.

P. ¿En qué tiene que mejorar este Madrid?

R. No podemos conceder tantas ocasiones de goles como contra el Zaragoza. Hay que estar más atentos, cuando sale un lateral, el otro tiene que cerrar la diagonal y el centrocampista ir a cubrir. Son mecanismos que se pueden mejorar.

P. ¿Cómo le irá a Capello en Inglaterra?

R. Triunfará. Le encantan los desafíos imposibles. Disfruta teniendo a todo y todos en contra.