Metro cambiará en seis meses las empresas que limpian sus instalaciones

La huelga de limpieza de Metro se acabó. Pero queda otro asunto peliagudo pendiente: el futuro de las concesionarias del servicio. El consejero de Transportes, Manuel Lamela, reiteró ayer que la Comunidad de Madrid "se mantiene" en su postura de rescindir los contratos, tal como anunció la presidenta, Esperanza Aguirre, el pasado 27 de diciembre durante una de las peores jornadas de los paros, que han durado tres semanas.

No sólo se van a rescindir, como ha mantenido en todo momento el Gobierno regional, sino que mientras buscan nuevas empresas contratarán otras auxiliares "por procedimiento de urgencia" para desligarse definitivamente de las actuales, aunque Lamela no especificó cuántos días necesitan para cerrar ese proceso. Lo que sí señaló el consejero es que el nuevo concurso se convocará en el segundo trimestre y que podrá estar adjudicado a nuevas concesionarias "en seis u ocho meses", según indicó ayer en Alcorcón, donde presentó con Mintra (Madrid Infraestructuras del Transporte) un sistema de control de infraestructuras.

Un portavoz de las actuales concesionarias -Clece, Valoriza, Eurolimp y Ferroser- indicó que no han recibido información oficial de la rescisión de los contratos, excepto el anuncio de que se ha iniciado el proceso. Las contratas mantendrán hoy una reunión con la Comunidad, según este portavoz.

300 euros

Tal como acordaron el domingo empresas y sindicatos tras cerrar la huelga, ayer de madrugada comenzó la limpieza exhaustiva de las estaciones de metro que han acumulado basura durante los 21 días de paro. A mediodía, los andenes de tres líneas (5, 6 y 9) tenían mucho mejor aspecto que durante la huelga, sin papeles y sin olores. En la mayoría de los casos, sólo faltaba fregar bien el suelo. Un portavoz de Metro aseguró a media tarde que sólo quedaban "dos o tres estaciones" en las que no se habían retirado las basuras, aparte de las pintadas que cubrían algunas estaciones.

Los trabajadores de limpieza de Metro que retomaron ayer su actividad normal cobrarán 300 euros extra en la nómina de enero por "el esfuerzo" de despejar el suburbano de basura "en el menor tiempo posible", según explicó Juan Francisco Canseco, trabajador y miembro del comité de huelga por UGT.