La preocupación por la economía crece entre los españoles

La encuesta que mensualmente realiza el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) demuestra que la preocupación de los españoles por los problemas económicos está creciendo. En noviembre, el mayor de los problemas ciudadanos vuelve a ser el paro, al menos para el 40% de los encuestados, seguido de la vivienda y de las dificultades económicas, que desbancan al terrorismo del tercer puesto.

Mientras que en la anterior encuesta, en octubre, el 31,6% de los españoles citaba a ETA como su principal problema, este mes el terrorismo registra un descenso de 2,5 puntos en esa lista. Bien es cierto que la encuesta se realizó entre el 23 y el 30 de noviembre, justo antes del atentado de la banda terrorista en Capbreton (Francia), donde ETA asesinó a dos guardias civiles.

El barómetro de octubre ya alertaba de que la falta de empleo era el mayor quebradero de cabeza para los españoles. Y esa preocupación ha aumentado 2,6 puntos en un mes. El problema de la vivienda le sigue de cerca, a pesar de haber bajado dos puntos y quedarse en un 32,9%; el tercer puesto es para lo que el estudio denomina "problemas de índole económica", que sube casi cinco puntos con respecto a octubre, hasta ser citado por un 29,4% de los encuestados.

Los datos presentados ayer, conseguidos partir de 2.462 entrevistas, reflejan la opinión generalizada de que el medio ambiente está en peligro, aunque el 31% reconoce que tiene cosas más importantes en las que pensar. Los "problemas medioambientales" ocupan el puesto 23 de la lista.

Este dato no impide que un altísimo porcentaje de los españoles (87,6%) afirme que está dispuesto a modificar sus hábitos de consumo y su estilo de vida para adaptarse al cambio climático. Aunque la mayoría está convencida de que lo que uno hace frente al calentamiento global no tiene ningún impacto si el resto de los ciudadanos no hace lo mismo y, sobre todo, si las empresas y las industrias más contaminantes no realizan más esfuerzos para proteger el medio ambiente.

La percepción de la situación económica es bastante pesimista, según la última encuesta del CIS. Si en octubre el 22,4% la consideraba "buena" o "muy buena", un mes más tarde pensaba así el 21,1%; el 46,1% de los ciudadanos preguntados la califica de "regular" y el 31,6% de "mala" o "muy mala". Tampoco a largo plazo creen los encuestados que vaya a cambiar mucho la situación: sólo un 10,7% augura que mejorará, mientras que el 42,6% cree que seguirá igual y un 32,4% que irá a peor.