Los grupos de trabajo conjunto continúan en dique seco

El Gobierno de la Junta de Andalucía siempre ha andado con pies de plomo en todo lo referido a su relación política con el Gobierno de Gibraltar. Frente a la fluidez y bilateralidad de las relaciones que Andalucía mantiene con Marruecos -el país más visitado, en 11 ocasiones, por el presidente Manuel Chaves- o con los países centroamericanos, la Junta siempre se ha situado varios pasos atrás en lo que a la colonia británica se refiere.

La falta de comunicación ha sido constante hasta hace bien poco y empezó a quebrarse tímidamente a partir de que se constituyera, en octubre de 2004, el Foro de Diálogo en el que participan los Gobiernos de España, Reino Unido y Gibraltar.

En este ámbito, la Junta ha estado presente sin perfil político alguno con la asistencia de técnicos cuando se abordan temas en los que la comunidad autónoma tiene competencias exclusivas.

En marzo de 2007 se acordó la incorporación de la Junta de Andalucía a la comisión mixta creada en noviembre de 2004 entre la Mancomunidad del Campo de Gibraltar y el Peñón. Sobre el papel hay creados cinco grupos de trabajo pero todavía no se han constituido porque Gibraltar no ha comunicado los nombres de sus representantes.

Fuentes de la Junta de Andalucía achacaban ayer este hecho no tanto al desinterés como a que la agenda de Gibraltar ha estado marcada por la celebración, el pasado mes de octubre, de las elecciones legislativas, que ganó por Peter Caruana por 600 votos de diferencia.

Los cinco grupos de trabajo deben abordar cuestiones sobre medio ambiente; educación; transporte y comunicación marítima; salud; y protección civil y coordinación de emergencias.