Amplio dispositivo policial para detener a unos ladrones en Meco

Una banda formada por españoles, muy violenta y dedicada al robo y tráfico de coches de gama alta, fue desarticulada ayer en una operación conjunta de la Guardia Civil y agentes de la Policía Local de Meco integrados en las Bescam. La espectacular operación comenzó a las siete de la mañana de ayer y en ella tomó parte el helicóptero de las Bescam. Es la primera vez que la aeronave actúa en una operación de estas características contra el crimen organizado.

Al menos siete personas, todas españolas, fueron detenidas durante el día de ayer, aunque no se descartan nuevas detenciones porque la operación policial sigue abierta, según fuentes de la investigación.

El helicóptero de las Bescam se estrena en el dispositivo

Los detenidos están acusados de los delitos de robo de coches, asociación ilícita, falsificación de documentos, incendio de vehículos y atentado contra agentes de la autoridad. Los dos últimos delitos corresponden a una de las acciones más violentas de la banda, en la que llegaron a quemar los coches particulares de dos policías locales de Meco, según estas mismas fuentes.

Por otra parte, cuatro atracadores robaron más de 300.000 euros del centro comercial Plenilunio el pasado lunes sobre las 20.45, a cara descubierta, con escopetas y motocicletas de gran cilindrada. Dos agentes de una empresa de seguridad privada que vigilaban el dinero resultaron heridos leves.

Los atracadores habían estudiado cómo llevar a cabo el golpe. Esperaron junto a una de las puertas secundarias de salida de la galería hasta que los agentes de la empresa de seguridad privada vaciaron la caja de una sucursal bancaria que se encuentra en el interior del centro comercial. Los agentes se acercaron a la furgoneta blindada que suelen emplear para trasladar el dinero cuando se toparon con cuatro individuos que les encañonaron y amenazaron. Se enfrentaron a los atracadores, que les sustrajeron sus armas reglamentarias y se escaparon con motos de gran cilindrada del centro comercial, dejando a dos de los custodios del dinero heridos.

La galería, situada en el kilómetro 16 de la carretera de Barcelona, tiene más de 50.000 metros cuadrados de tiendas. El lunes a última hora estaba abarrotada de clientes. Ayer, los empleados de las tiendas continuaban nerviosos. "Al principio no entendía nada, una mujer vino diciendo que había hombres armados y me asusté", recuerda una de ellas.