Serrano tendrá carril bici, más árboles y aceras más anchas en 20 meses
El Ayuntamiento prevé financiar el cambio con aparcamientos subterráneos
La calle de Serrano (la más comercial de la capital tras Preciados) va a sufrir un fuerte lavado de cara. El Ayuntamiento ultima estos días un plan de reforma, que incluye un carril bici, más árboles y reducir la calzada para los vehículos particulares. Los trabajos, que durarán 20 meses, no supondrán en principio ningún desembolso para las arcas municipales. El proyecto incluye al menos tres aparcamientos subterráneos para residentes.
Los cinco carriles para el tráfico privado actuales se reducirán a tres
El Ayuntamiento quiere que el peatón gane mucho espacio en este eje importante comercial, que acoge a las principales marcas de lujo y que atrae miles de personas al día. Para ello, ha decidido ampliar las aceras de forma que los coches aparcados desaparezcan de la superficie. Los más favorecidos serán los edificios de la acera de los impares, según el diseño ganador del concurso de ideas, titulado Tejido Urbano. Estos edificios (los más próximos al paseo de la Castellana y la plaza de Colón) verán cómo sus aceras se amplían en 3,5 metros, lo que supone algo más que el ancho actual de un carril. De este modo, pasarán de los cinco metros actuales a más de ocho.
Pero el nuevo diseño será aún más ecológico, según explicó a este periódico la concejal de Obras, Paz González. Los vecinos verán cuando terminen las obras otra segunda hilera de árboles. Además de dar mayor colorido a la zona, pretende separar físicamente una de las novedades introducidas últimamente en el proyecto: el carril bici. Esa doble línea de árboles será más una separación física entre los peatones y los coches. "Queremos que los madrileños utilicen este transporte que no contamina y que es tan frecuente en otras ciudades europeas", explicó la concejal.
Otra característica destacada del proyecto es que el transporte público tendrá dos carriles exclusivos. El más próximo a la derecha, en la acera de los impares, se destinará a los autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT). Los taxis, por el contrario, tendrán el carril opuesto, el de los pares. Ésta será la primera vez en la capital que los taxistas dispongan de un carril propio no compartido con los autobuses. "Queremos que la gente aparque el coche y utilice el transporte público. Es la forma de que se vaya reduciendo y la gente se conciencie de que hay que aparcar el vehículo particular para venir al centro de Madrid", añadió Paz González.
Con el nuevo diseño, el vehículo particular dispondrá de tres carriles, frente a los cuatro y cinco actuales, lo que reducirá de forma drástica el nivel de circulación en esta vía
El Ayuntamiento ha fijado un periodo de ejecución de la obra de 20 meses. En la actualidad está concluyendo "algunos remates", de forma que el proyecto pueda ser presentado a concurso público antes de que termine el año o en los primeros días de 2008. Esto supondría que, cumpliendo los plazos legales previstos, las obras podrían comenzar en el mes de abril.
Pero, ¿qué coste tendrán estas obras para los madrileños? "En principio, cero" afirma tajante la concejal del área. Se está estudiando la construcción de aparcamientos subterráneos en la calle. Hasta la fecha se barajan al menos tres, de forma que, al salir a concurso público, sea la iniciativa privada la que financie la obra. "Está claro que, si quitamos los coches de la superficie, tenemos que dar un espacio para que puedan ser aparcados. Eso sólo se consigue de esa forma", añade González.
La reforma es todavía más ambiciosa, ya que las calles perpendiculares a Serrano también sufrirán un lavado de cara, de forma que se gane al menos el 50% de espacio para el peatón.
González afirmó que el proyecto ha sido consensuado con los comerciantes de la zona, que, según sus palabras, lo han visto "con muy buenos ojos". "Es un proyecto muy ambicioso y espectacular", concluyó la edil.
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