La esposa de Publio Cordón se encara con el abogado de los grapos
"Son terroristas sanguinarios y lo más bajo de la sociedad", afirma Pilar Muro
"No lo liberaron [a Publio Cordón] porque seguramente lo asesinaron, porque son terroristas sanguinarios y lo más bajo de la sociedad". Así de contundente se expresó ayer Pilar Muro, esposa del empresario zaragozano Publio Cordón, secuestrado por los GRAPO en 1995, cuando el abogado Juan Manuel Olarieta, defensor del máximo responsable político de la banda, Manuel Pérez Martínez, Camarada Arenas, y de su compañera sentimental Isabel Llaquet, trató de hacer ver que los grapos dicen la verdad cuando aseguran que liberaron a Cordón en agosto de 1995 en Barcelona y que la familia miente.
Pilar Muro, que declaraba en calidad de testigo, había explicado que la familia Cordón dirigió cartas a la dirección de la banda, al jefe del comando central de los GRAPO, Enrique Cuadra, y a todos los miembros de la organización terrorista que estaban encarcelados, en las que pedían que les informaran del paradero de su marido. Ninguna de las cartas tuvo respuesta.
Pilar Muro. "La carta enviada a la dirección de los GRAPO fue entregada en mano a un abogado de la organización. En ella se decía que nosotros habíamos cumplido [la familia pagó en París 400 millones de pesetas por la liberación de Cordón] y que no habían liberado a Publio".
Juan Manuel Olarieta. "¿Cómo sabe que no es cierto?"
P. M. "Porque han pasado 13 años y Publio no ha aparecido".
J. M. O. "¿Cómo puede estar segura de que no lo liberaron?"
P. M. "No lo liberaron porque seguramente lo asesinaron, porque son terroristas sanguinarios y lo más bajo de la sociedad".
Como el letrado insistiera en la defensa de los grapos, la esposa de Cordón dijo: "Los terroristas son capaces de cualquier cosa (...). Las víctimas tenemos terror, sabemos en manos de quién estamos, cumplimos con lo que nos dicen porque queremos liberarnos de aquello y si no está mi marido es porque ellos no han tenido ningún miramiento, la vida humana para ellos no es nada absolutamente. Lo han demostrado en muchísimas ocasiones".
También la hija del secuestrado narró cómo negociaron el pago del rescate y cómo viajó a París con su marido, Ignacio Jiménez, para entregar el dinero. Carmen Cordón explicó que salieron en un Volvo granate desde Madrid con tres bolsas de deporte que contenían los 400 millones de pesetas en el maletero.
"Los secuestradores nos habían dado una serie de instrucciones, como que fuéramos vestidos de blanco y que esperásemos la llamada en una cabina de teléfonos", dijo Carmen. "Luego, nos tuvieron dando vueltas por París durante toda la mañana y parte de la tarde, siguiendo las directrices que nos marcaban, y sobre las ocho de la tarde, Cuadra, que se identificó como Benito, nos abordó, subió al coche con otro terrorista, que luego identificamos como Fernando Silva, y se llevaron el dinero".
Insinuaciones
El letrado Olarieta insinuó que Carmen Cordón no fue a París con su marido para el pago del rescate, sino que la entrega del dinero la hicieron dos varones.
Sin embargo, no aportó ninguna prueba. Y la declaración de Ignacio Jiménez fue decisiva, puesto que tras narrar las vicisitudes de la negociación con los miembros de la banda terrorista, tras contratar a una empresa británica especializada en el trato con terroristas, explicó detalladamente cómo se entregó el dinero en presencia de Cuadra -ya condenado a 27 años de cárcel por el secuestro- y de Silva -para el que el fiscal reclama la misma pena, y la familia un total de 36 años por el secuestro y por estafa-.
Jiménez dijo que les preguntó por la liberación de su suegro, pero que ellos le dijeron que tenían que hacer contabilidad, ver si las bolsas tenían dispositivos de seguimiento y en unos días lo liberarían.
El fiscal elevó a definitivas sus conclusiones en las que reclama 27 años para Fernando Silva, Manuel Pérez Martínez e Isabel Llaquet por secuestro con desaparición.
Silva en el turno de última palabra se quejó de que la sociedad ya le ha condenado e insistió en que nunca ha hecho nada con Publio Cordón. Pérez Martínez fue expulsado de la sala cuando dijo que España sigue siendo fascista.
El juicio quedó visto para sentencia y el paradero de Publio Cordón sigue sin esclarecerse.
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