38 argelinos llegan a Alicante en pateras

Al menos cuatro pateras con 38 inmigrantes ilegales a bordo fueron avistadas por el pesquero Siempre Calima en la madrugada de ayer a 50 millas del Cabo de Palos (Murcia). Dos buques de Salvamento Marítimo interceptaron y rescataron a 38 inmigrantes, todos varones, mayores de edad y en buen estado físico, pasadas las tres de la madrugada.

Los inmigrantes, que mayoritariamente proceden de Argelia, intentaban alcanzar la costa de la Península Ibérica a bordo de cuatro pequeños botes salvavidas, de unos 4 metros de eslora, equipados con pequeños motores de 25 y 40 caballos de potencia. Dos buques de Salvamento Marítimo rescataron y trasladaron al puerto de Alicante a los náufragos, ya que el buque Salvamar Polaris tiene su base allí y además el rescate se produjo en aguas jurisdiccionales valencianas. Esta oleada se suma a la registrada el martes en Murcia, donde fueron rescatados otros 37 inmigrantes.

Sobre las 13.35 horas arribaron sanos y salvos al puerto de Alicante. Allí, en el muelle 12, les aguardaba un operativo de más de 50 personas, entre Policía Nacional y Cruz Roja, dispuestos a someterles a una revisión médica y a la posterior identificación. Fuentes de Cruz Roja explicaron que todos se encontraban bien de salud, salvo dos de ellos: uno sufría hipotermia y el otro, una bajada de tensión. "Han estado toda la noche en alta mar y su ropa está mojada", dijo Manuel Rodríguez, portavoz de Cruz Roja.Las cuatro pateras con inmigrantes sin papeles se dirigían hacia Cartagena, pero fueron interceptadas en aguas de la Comunidad Valenciana y por efectivos de Salvamento Marítimo con base en Alicante. Esta coyuntura casual sirvió para para que dos consejeros de la Generalitat y dirigentes del PP valenciano arremetieran contra la política migratoria del Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero.

El consejero de Inmigración, Rafael Blasco, atribuyó esta nueva llegada de pateras a la "nefasta e ineficaz política migratoria" del Gobierno. Blasco cifró en 3.000 los inmigrantes trasladados a la Comunidad Valenciana durante los últimos dos años. En la misma línea, el consejero de Gobernación, Serafín Castellano, exigió un plan y el refuerzo de la vigilancia para evitar que la costa valenciana se convierta "en un nuevo punto de entrada de inmigrantes". Ricardo Costa, secretario general del PP, se preguntaba por los motivos por los que el Gobierno no ha puesto en marcha el sistema de vigilancia que anunció este verano cuando llegaron a Benidorm y otros puntos de la costa de Alicante cinco pateras procedentes de Argelia.

La Subdelegada del Gobierno en Alicante, Encarna Llinares, rechazó la batería de acusaciones del Consell y recordó que la instalación de un radar fijo en la Serra Grossa, en el término municipal de L'Alfàs del Pi, está aprobado y presupuestado en 8 millones de euros, "pero se deben cumplir unos plazos y una tramitación", explicó. Llinares pidió a los dirigentes del PP "un poco de sentido común y sensatez" a la hora de criticar al Gobierno en esta materia y lamentó que los consejeros empezaran a criticar antes incluso de que los inmigrantes llegaran a tierra. El delegado del Gobierno, Antoni Bernabé destacó que el Gobierno de Zapatero ha "multiplicado por cinco lo que invirtió de media anual el Gobierno de Aznar".

Hoy está previsto que la Oficina de Extranjería de Alicante tramite las órdenes de expulsión de estos 38 inmigrantes argelinos sin papeles.

La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) denunció ayer que no había vigilancia costera en Alicante debido al "elevado número" de bajas médicas de los agentes de la Guardia Civil, ya que hace un mes han modificado los turnos de trabajo, que no son de 24 horas, sino de seis cada día y rotarios. "No hay efectivos suficientes y algunos barcos están averiados", aseguró ayer un portavoz de esta asociación.