Los accidentes de tractor se cobran la vida de diez agricultores este año
Los sindicatos piden que estos sucesos se consideren siniestros laborales
Agustí Coloma araba con su tractor un campo de olivos en la localidad de La Jana (Baix Maestrat) en la tarde del pasado 7 de septiembre. El vehículo volcó al llegar a un terraplén, y aplastó al agricultor. A Coloma le dio tiempo de avisar con su móvil sobre el accidente, pero poco más. Cuando llegó la ayuda había muerto. Tenía 57 años.
La mayoría de los fallecidos eran campesinos de más de 50 años
Coloma, agricultor profesional, murió mientras trabajaba, pero no figurará en las estadísticas oficiales de siniestralidad laboral de la Comunidad Valenciana, ya que los accidentes en tractores se consideran de tráfico porque en muchos casos se producen mientras los vehículos circulan por carreteras, de camino al tajo o de vuelta a su domicilio. El caso de Coloma no es aislado. Diez agricultores han perdido la vida este año en el campo valenciano y al menos otros nueve han resultado heridos de gravedad en distintos accidentes de tractor, según los datos facilitados por el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) y las informaciones publicadas por este periódico.
Tractor viejo y agricultor mayor: una combinación fatal. En muchos de estos accidentes hay coincidencias. Un agricultor de 70 años muerto en mayo en Andilla (Valencia), otro de 78 años que perdió la vida al mes siguiente en Benisili (Alicante) o la última víctima, de 63 años, en la pedanía oriolana de Torremendo. Con alguna excepción, la edad de los agricultores fallecidos o heridos es superior a los 50 años. Y las últimas estadísticas oficiales, de hace unos años, indican que más de 15.000 de los 61.000 tractores que operan en el campo valenciano superan los 20 años de antigüedad y, por tanto, carecen en general de los sistemas de protección necesarios, explica Joan Brusca, secretario general de la Unió de Llauradors.
La antigüedad de estos vehículos es uno de los factores que explican estos fatales accidentes. En España mueren de media 60 agricultores al año en este tipo de accidentes, según un informe universitario que maneja la Unió de Llauradors. La realidad, en cualquier caso, es difícil de acotar y las cifras apenas recogen algunos de los desenlaces más graves.
Y es esa, precisamente, una de las principales quejas de las organizaciones agrarias valencianas. Brusca considera fundamental que estos accidentes tengan la consideración de laborales para que "las Administraciones sean conscientes del problema" y tomen medidas efectivas. En la misma línea, a finales del pasado mes de septiembre, el sindicato UPA reclamó que las muertes por vuelco de tractor se contabilicen dentro de los datos oficiales de siniestralidad laboral. El sindicato agrario reclamó también que la Generalitat se replantee las medidas de prevención de accidentes "en el sector primario".
El secretario general de la Unió de Llauradors considera que esta realidad "va ligada" al envejecimiento de los agricultores, a la falta de relevo generacional que sufre el campo valenciano y también a la falta de rentabilidad de la propia actividad. La Unió reclama "desde hace tiempo" una apuesta clara de potenciar el Plan Renove con ayudas atractivas para rejuvenecer este parque de vehículos. Pese a ello, Brusca reconoce que el Gobierno ha incrementado las ayudas que arbitró inicialmente en 2005 para facilitar que los agricultores renueven los tractores con los que trabajan.
El responsable agrario valenciano defiende también que la Administración debería buscar "algún sistema de acoplar una estructura homologada" para la protección del agricultor en los vehículos antiguos. También reclama más formación y acciones que difundan la prevención de riesgos laborales entre los profesionales del sector.
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