Uno de cada cuatro valencianos es socio de una cooperativa

El crecimiento económico del cooperativismo en la Comunidad Valenciana fue el mayor de España el pasado año. Y el crecimiento del empleo cooperativo ocupó el primer lugar de la clasificación, puesto que ha ocupado en los últimos cuatro años en los que registró un aumento del 36,44%, por delante del 15,69% de Andalucía. El buen estado del cooperativismo valenciano quedó ayer patente en la celebración del 85º día del cooperativismo, durante el que se aportaron los datos que sostienen el grado de implantación de esta fórmula en la Comunidad Valenciana.

Así, como dijo el presidente de la Confederación de Cooperativas de la Comunidad Valenciana, Luis Valero, uno de cada cuatro valencianos es socio de una de las casi 3.000 cooperativas en la que trabajan más de 80.500 personas y que suman un volumen económico de 16.780 millones de euros. El sector que aglutina mayor volumen económico es el de crédito, ya que en la Comunidad Valenciana operan 36 cajas rurales, prácticamente la mitad de las que existen en España. Por número de socios, el sector más destacado es el de consumo y por número de empleados, las cooperativas agrarias.

Con estos datos, que reflejan el peso del cooperativismo en la economía valenciana, el presidente de la confederación reclamó más atención de la Administración autonómica. "Estamos menos bien de lo que podríamos estar", dijo Valero, quien recordó que, antes de las elecciones, el consejero de Economía, Gerardo Camps, aceptó una propuesta para la firma de un acuerdo marco para impulsar el desarrollo de las cooperativas. El convenio no ha sido incluido en los presupuestos para 2008 pero para Valero "no se trata solo de poner dinero sobre la mesa, sino de tener una línea de comunicación mutua y que desde la Administración se visualicen bien las potencialidades que tiene el cooperativismo que, desde mi punto de vista, son importantes".

"Nosotros no deslocalizamos", apuntó Luis Valero al destacar las cualidades y características del cooperativismo y su papel en la economía. "Estamos enraizados en el territorio y no somos susceptibles de compras ni OPA", añadió. Así, reclamó una "apuesta más decidida", también por parte de las Administraciones locales, porque la implantación territorial es una de las virtudes que les distingue, sin olvidar, tal como recalcó, el hecho de que las cooperativas han de ser "eficientes y rentables".

El director general de Trabajo, Román Ceballos, que acudió al encuentro de Castellón quiso apaciguar la reivindicación y aseguró que la Generalitat "tiene una valoración muy positiva del sector cooperativo y de la economía social".