El equipo que aupó a Zapatero

El equipo que aupó al poder a José Luis Rodríguez Zapatero, con el ministro de Trabajo Jesús Caldera a la cabeza, estará presente en la elaboración del próximo programa electoral. En primera línea, Caldera ha situado a Valeriano Gómez, ex secretario general de Empleo, ahora al frente del comité de redacción. También estarán el diputado y también miembro de la ejecutiva federal José Andrés Torres Mora, Carlos Mulas y David Giménez Glück. En el siguiente círculo concéntrico de colaboradores están todos los que empezaron la aventura de Nueva Vía en el año 2000. En ese grupo, que apostó por la renovación del PSOE tras la derrota electoral del 2000, se encuentran Jordi Sevilla, Trinidad Jiménez, Juan Fernando López Aguilar, Carme Chacón, Leire Pajín y Amparo Varcarce. Ahora colaborarán con Caldera en la elaboración del programa, junto al economista David Vegara. También Consuelo Rumí, secretaria de Estado de Inmigración, la ministra Cristina Narbona, la ex ministra Carmen Alborch, el coordinador de los diputados del PSC en el Congreso, Daniel Fernández, y la responsable de Economía de la dirección federal, Inmaculada Rodríguez-Piñero.

Después de este segundo círculo, entran en esta tarea todos los miembros de la ejecutiva federal, los portavoces parlamentarios de todas las áreas del PSOE y personas de relevancia en el ámbito socialista que siempre han optado por un perfil casi anónimo como es José Enrique Serrano, director de gabinete del Presidente y el subdirector, Enrique Guerrero. La tarea de todos ellos es ofrecer un programa "real", según expresión de algunos de los muchos intervinientes.

Para este programa, los socialistas han tejido una red tupida y extensa de colaboradores con el afán de ajustarse y afinar al máximo las ofertas a los ciudadanos. Caldera ha trazado seis ejes de actuación, formados por consejos de 50 personas cada uno. Junto a ellos, 40 grupos de trabajo, todo voluntario, con expertos en las más diversas materias. En estas semanas "cabrá todo", según asistentes a las reuniones pero, en una segunda fase, se irá puliendo para ajustarlo a las posibilidades económicas. Aunque el secreto es absoluto, se reconoce que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, les ha indicado que todo el programa debe estar impregnado del proyecto "reformista" que ya está en marcha.

Algunas de las propuestas son previsibles, aunque no por ello poco importantes, según el PSOE, porque obedecerán a plazos previstos. La subida del salario mínimo y el alza de las pensiones en general y de las mínimas en mayor magnitud y las previsiones de "pleno empleo" son ofertas que los socialistas ofrecerán como continuación de las políticas ya comenzadas. El máximo sigilo se lleva en torno a las propuestas de ampliación de derechos.