"Hay que ajustar el coste de los pisos al poder adquisitivo"

Empresario inmobiliario desde los 20 años, Ángel Jove Capellán (A Coruña, 1939) lleva en el sector casi cinco décadas. En este tiempo ha levantado una empresa de 1.600 trabajadores que en 2006 facturó 150 millones con intereses en vivienda, centros comerciales, hoteles y geriátricos. Pese a los tiempos inciertos que corren en la construcción prevé invertir 2.500 millones en los próximos cinco años, y apuntalar su expansión internacional.

Pregunta. Proliferan los síntomas de que el mercado de la vivienda se frena. ¿Son malos tiempos para el sector?

Respuesta. Buenos no son. Han caído las Bolsas, no se vende, las hipotecas suben. Lo suficiente para que no sean buenos.

P. Usted lleva 50 años de trayectoria en el sector, ¿hay diferencias con otras crisis?

"A los corruptos del sector inmobiliario que los metan en la cárcel y no hagan publicidad, son casos aislados"

R. Los años setenta fueron muy malos. Este momento no es tan malo.

P. ¿Y observa diferencias?

R. La diferencia principal la veo en el suelo. Tenemos poco suelo para trabajar. Si baja el suelo, el coste de la vivienda bajará. La repercusión del suelo es lo que más la encarece. ¿Dónde tenemos los problemas en el suelo? En la carestía y en la gran especulación. Todo el mundo se enriquece, y no tanto los promotores, como los propietarios del suelo.

P. Pero han subido los beneficios.

R. Todo promotor tiene que tener unos beneficios.

P. ¿Se pueden resistir nuevas subidas de los tipos de interés?

R. Sería muy malo. No es bueno que suban las hipotecas.

P. ¿Han notado en Anjoca los problemas de encarecimiento de los créditos en sus planes de expansión y financiación?

R. De momento, no.

P. ¿Creen que la expansión exterior compensa el frenazo en España?

R. Los problemas que estamos teniendo aquí nos obligan a salir al exterior para poder trabajar y crecer. Aquí, hoy por hoy, tal como están las cosas no podemos crecer. Los fabricantes de pisos tenemos que vender un producto con mercado para ello. Hombre yo puedo hacer 20 o 30 pisos de cien millones para 20 o 30 señores, pero no mil porque me los comeré. Tenemos que ir a un tipo de vivienda más pequeña que la que se hacía, pero con un precio que pueda llegar la gente que trabaja. Y creo que todos los promotores somos consecuentes de que hay que buscar este mercado. Pero el suelo no nos deja.

P. Las inmobiliarias ofrecen ofertas para sortear el enfriamiento.

R. Las ofertas nunca son buenas. No se vende con la rapidez de antes, pero se va vendiendo. La cosa tampoco ha caído un 100%. Hay que poner precios acorde con el poder adquisitivo de los compradores. En vez de construir 100 viviendas, construyes 1.000. Y en lugar de lograr un beneficio del 20%, pues uno del 10% o el 12%. Puedes ganar lo mismo pero trabajas más.

P. ¿Encuentra diferencias entre hacer negocios inmobiliarios en España y fuera?

R. En otros países que están empezando quieren desarrollo y turismo, te vienen a buscar, te ofrecen suelo... Encuentras más ayuda para resolver los problemas burocráticos.

P. ¿Qué le parece la apuesta del Gobierno por el alquiler?

R. Anjoca cuenta con viviendas en alquiler. En Canarias tenemos bloques de viviendas en alquiler. Si las leyes las hacen bien, construiremos encantados viviendas en alquiler. Ahora, con qué leyes. Con las leyes que han sacado de desahucio no puedes echar a un señor que no paga. Las leyes tienen que mejorar la situación del inquilino y del arrendador.

P. Los casos de corrupción aparecidos han asociado en buena medida la imagen del sector inmobiliario a la corrupción. ¿Qué le parece?

R. Mi opinión es que a los corruptos que los metan en la cárcel y que no hagan tanta publicidad. En nuestra delegación en Londres tenemos más gente para preguntarnos qué pasa en España, qué seguridad tiene el inversor que nos ha comprado pisos que para de comprar pisos. Pero son casos aislados por los que no se debe de valorar a todos los promotores, eso debe de quedar bien claro.