Baile de 'malayos' en los juzgados
Ex concejales de Marbella han declarado en los últimos días por diversas causas
Los juzgados de Marbella se han convertido en el plató de un espectáculo en el que lo de menos son las causas por las que están imputados quienes los visitan. Esta semana han vuelto a entrar en los hogares de media España por la citación de una decena de miembros de antiguas corporaciones, la mayoría imputados en el caso Malaya.
Se ha visto entrar y salir del edificio a la ex alcaldesa Marisol Yagüe, la ex primera teniente de alcalde Isabel García Marcos o el también ex regidor Julián Muñoz. En segundo plano lo han hecho ediles menos conocidos como Tomás Reñones, Rafael Calleja, Pedro Pérez, Javier Lendínez o Carmen Revilla. El broche lo pone hoy el ex asesor de Urbanismo Juan Antonio Roca. Han acudido para declarar por diligencias previas en distintos casos de presunto delito urbanístico. El menú ha merecido que se envíen unidades móviles de televisión casi una semana.
La atención de las televisiones atrae a curiosos que buscan protagonismo
La estrella por excelencia ha sido Julián Muñoz. Estaba citado el martes y era la primera vez que salía de la prisión de Jaén después de conocerse que tiene posibilidades de quedar libre si sus abogados logran un permiso penitenciario. Después de cuatro horas en los juzgados, volvió a salir con chaqueta marrón y rostro demacrado. Cuatro jóvenes llamados al calor de las cámaras se situaron en uno de los miradores desde los que se divisa la puerta de los calabozos y explotaron en cuanto le vieron: "¡Ladrón, devuelve los millones!", dijo una chica de unos 16 años vestida con un chándal rosa. "¡Bájate los pantalones, que te llegan a los sobacos!", añadió otro joven unos años más mayor, que redondeó el comentario escupiéndole.
Muñoz, que ocultaba las esposas con su tradicional carpeta azul, aligeró sus pasos y se resguardó en el furgón de la Guardia Civil. El agente que conducía tuvo dificultades para maniobrar porque Mocito feliz, un personaje local cuya actividad favorita es aparecer en los programas de televisión del corazón, les impedía la salida, consciente de que los cámaras filmaban la salida.
"¡Mocito, cuántas veces te he dicho que no te metas en los planos", le regañaba ayer un cámara de Televisión Española después de que le estropeara la llegada de Marisol Yagüe. "Es que no te das cuenta que no es serio que salgas detrás de ellas en los informativos", le decía.
Las imágenes que compran los programas del corazón son las mismas que las agencias venden a los informativos, aunque los locutores subrayen aspectos distintos. Debido a esto, en las ruedas de prensa de la puerta de los juzgados chocan los intereses de los redactores. De los 10 minutos que Isabel García Marcos estuvo hablando a los micrófonos ayer, ocho fueron para contar que había pasado toda la mañana poniéndose al día con sus antiguos compañeros y para explicar lo mal que lo había pasado cuando unos vecinos la habían llamado "choriza". mientras iba con su madre, su atónita hija y casualmente la estaban grabando.
La atención que generan los imputados en el caso Malaya anima a los espontáneos a luchar por su minuto de gloria. Marisol Yagüe se topó ayer con otra visita inesperada cuando pretendía marcharse en el coche. "Me has destrozado la vida. Me desahuciaron siendo tú alcaldesa y no te lo voy a perdonar", le decía la mujer, acompañada de un niño de cinco años. Mientras capeaba el enjambre de cámaras la antigua alcaldesa no tuvo más remedio que pedirle perdón. "No te voy a perdonar, pero dame un abrazo", le dijo la mujer. Y se lo dio. "Ahora me siento realizada como mujer", dijo con media sonrisa.
No muy lejos, una abogada contemplaba la escena. "Si este es el panorama informativo que tenemos estamos arreglados", comentaba. Tan sólo cuatro redactores, entre más de una veintena, trataban de cazar a los letrados que se alejaban para preguntarles de qué se había hablado en el interior de las salas.
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