El jefe de policía afirma que el botellón es un "déficit educativo"
Una cosa son "conductas incívicas e insolidarias", como las molestias que causan las grandes concentraciones nocturnas de jóvenes en plazas públicas o calles para tomarse unas copas, y otra, muy diferente, es la comisión de un delito. El jefe superior de Policía en Galicia, Luis García Mañá, hizo ayer esta advertencia al hacer un llamamiento a las autoridades a tratar de evitar la vía policial para resolver los problemas que causan el botellón.
"Es un déficit educativo, y los comportamientos asociales, que no se deben confundir con el delito, sólo se pueden solucionar con medidas administrativas", abundó el responsable de la Policía. En plena polémica por los macro botellones que se celebran cada fin de semana en el corazón de A Coruña, García Mañá insertó en su discurso del Día de la Policía varias referencias a este problema que enfrenta a los vecinos afectados con el Ayuntamiento.
El jefe de la Policía, al insistir en que tanto Galicia como A Coruña tienen una de las tasas de criminalidad más bajas de España, lamentó que problemas como el botellón ofrezcan "una imagen" de falta de seguridad ciudadana "que no se corresponde con la real".
"Un espacio limpio y bien iluminado genera mayor percepción de seguridad", explicó García Mañá, como también lo hace "una ciudadanía educada en valores sociales". Las referencias del jefe Superior de Policía de Galicia al botellón se producen tras el escaso éxito del operativo especial de vigilancia que el Ayuntamiento puso en marcha, con la colaboración de agentes tanto municipales como nacionales, el pasado fin de semana en los lugares de movida nocturna de A Coruña.
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