Los niños y el público familiar abarrotan los actos de día

De día, los reyes de la fiesta de la Mercè son los niños. Especialmente en el tramo del paseo de Gràcia comprendido entre la calle de Aragó y la Ronda de Sant Pere. Allí está ubicada la llamada Ciudad de las Personas -vecina de la feria del libro antiguo y de ocasión-, una iniciativa que divulga el trabajo de servicios municipales básicos, como el que realizan las bibliotecas.

Ayer, la atracción más concurrida allí -el enclave estuvo abarrotado mañana y tarde por un público familiar- fue la grúa que utilizan los bomberos para apagar los incendios de los edificios. Los operarios no daban abasto para atender a los niños que se querían subir a la cabina.

No fue el único éxito de la jornada, generosa en actividades gratuitas, entre ellas numerosas convocatorias de cultura tradicional. Dentro de la Mercè más marina, las 3.500 entradas que se repartieron en el puerto para visitar sus instalaciones desde las populares golondrinas se agotaron en apenas tres horas. Las largas colas que se formaron al principio de la mañana ya anunciaban un seguimiento masivo.

Dentro de la programación cultural, también destaca la oferta de varios museos de Barcelona, que en su mayoría celebran jornadas de puertas abiertas durante estos días festivos. Es el caso del CosmoCaixa, el Palau de la Virreina o el Caixafòrum. Otros sólo han fijado una jornada de puertas abiertas, como hoy la Fundación Tàpies y mañana el museo Picasso y el de Historia de Cataluña.