Casi 90 muertos al estrellarse un avión en un aeropuerto turístico de Tailandia

Al menos 88 personas murieron al estrellarse ayer un avión de la aerolínea tailandesa de bajo coste One-Two-Go cuando aterrizaba en el aeropuerto de la turística isla de Phuket, al sureste de Tailandia. En la aeronave, que había partido de Bangkok, viajaban siete tripulantes y 123 pasajeros. Entre ellos había unos 50 occidentales, mayoritariamente británicos y alemanes, pero ningún español, según la información facilitada por el Ministerio de Exteriores. Un superviviente afirmó que el avión aterrizó a demasiada velocidad bajo una torrencial lluvia.

"El avión estaba al pie de la colina. Cuando llegué me dio la impresión de que se había salido de pista y había chocado contra la ladera. Yo estaba en la cima y veía salir mucho humo del avión. Estaba ya partido en varias partes y ardía en llamas", relató a los medios tailandeses el pastor Leslie Quahe, que llegó al sitio de la catástrofe poco después de producirse.

El avión, un McDonnell Douglas MD-82, aterrizó bajo una incesante lluvia y se deslizó fuera de la pista para estrellarse contra un muro y varios árboles. Tras el impacto se escucharon varias explosiones. "El avión se incendió inmediatamente después de quedar detenido", relató Nong Khaonual, uno de los supervivientes, al canal local ITV. Este pasajero declaró que para él, el accidente se había producido porque el descenso del avión hacia la pista había sido demasiado rápido. "Estaba lloviendo e iba demasiado rápido... En cuanto tocó tierra sentimos que el aparato daba un salto brusco y después se salió de la pista", añadió el pasajero. Las autoridades, por su parte, se negaron a especular sobre las causas del siniestro.

Hasta última hora de ayer, los servicios de rescate habían recuperado 88 cadáveres. En cuanto a los heridos, el hospital General y el Siriraj, ambos en la ciudad de Phuket, confirmaron que habían ingresado a más de una cuarentena de personas con heridas de diversa consideración. Entre ellos había una docena de tailandeses, ocho británicos, cinco alemanes y tres italianos.

La Embajada de España en Bangkok informó anoche de que no tiene constancia de que viajaran españoles en el avión de la aerolínea de bajo coste tailandesa que se estrelló. "Hasta el momento no tenemos información de que entre los pasajeros hubiera de nacionalidad española", según fuentes diplomáticas.

Uno de los responsables de la aerolínea One-Two-Go, Udom Tantiprasongchai, se mostró "conmocionado" con la noticia del accidente. El ejecutivo, que se ocupa de la gestión comercial de Orient Thai Airlines -la compañía propietaria de la aerolínea One-Two-Go-, dijo a una cadena de televisión que el de Phuket había sido "el primer accidente en más de una década de su grupo".

One-Two-Go y su matriz, Orient Thai, operan una flota de seis Boeing 747 y siete McDonnell Douglas MD-82. One-Two-Go comenzó a funcionar en diciembre de 2003 y opera 168 vuelos a la semana y transporta unos 150.000 pasajeros mensualmente, tanto en vuelos domésticos como hacia Hong Kong y Corea del Sur.

El aeropuerto internacional de Phuket ha sido temporalmente cerrado hasta que finalicen las tareas de rescate. La ciudad fue una de las más devastadas por el tsunami de 2004.