La reforma de Interior da más poder a Boada frente a Delort

La nueva organización del Departamento de Interior, que el martes será aprobada por el Gobierno catalán, otorga más competencias al secretario general y número dos del departamento, Joan Boada, en detrimento del secretario de Seguridad Pública, Joan Delort. La reforma, diseñada por el consejero Joan Saura, deja en manos de Boada dos direcciones generales que, hasta la fecha, estaban bajo el mando de Delort.

El secretario general, que además es un peso pesado de Iniciativa per Catalunya Verds, se hará cargo a partir de ahora de la recién creada Dirección General de Protección Civil y de la Dirección General de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento. Las emergencias, pues, estarán en manos de un cargo con un perfil marcadamente político. Todo lo contrario que Delort, un cargo técnico heredado de la etapa de gobierno de Convergència i Unió, y que fue mano derecha de la ex consejera de Interior, la socialista Montserrat Tura.

Se da la circunstancia, además, de que las dos nuevas áreas que controlará Boada (Protección Civil y Emergencias) se "potenciarán" y se dotarán de mayores recursos, según un comunicado difundido ayer por el departamento. También quedarán en manos de Boada los siete nuevos servicios territoriales de Interior.

El objetivo del cambio organizativo en el Departamento de Interior, Relaciones Institucionales y Participación es facilitar el despliegue de los Mossos d'Esquadra, que culminará en 2008. A esa tarea se encomendará Delort, ya que será aligerado de algunas de sus tareas. El secretario de Seguridad Pública asumirá, además, las competencias en materia de seguridad que otorga el nuevo Estatuto; por ejemplo, en el ámbito de la seguridad privada.

El decreto de reestructuración contempla la creación de un Observatorio del Juego, que elaborará estudios y promoverá el "juego responsable".