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Reportaje:

"Cuando yo pase a tu lado, agacha la cabeza"

Un joven denuncia el ataque de un conocido neonazi en Pozuelo

Esther Sánchez

Un joven de Pozuelo de Alarcón, G. E., de 18 años, resultó herido leve el viernes de la semana pasada tras sufrir una agresión mientras esperaba al autobús a la una de la tarde. La víctima ha denunciado a un conocido neonazi de la zona, J. M. F., como supuesto autor del ataque. El agresor le agarró por el cuello, le llamó "rojo de mierda" y le pegó un golpe en la frente, que le provocó una contractura cervical.

El presunto atacante se enfrenta a otra denuncia por su supuesta implicación en un asalto a un grupo de personas en las fiestas de agosto de Pozuelo en 2006. La agresión se saldó con siete personas heridas leves, una de ellas concejal socialista.

Varios testigos le han reconocido también como integrante de un grupo de neonazis que agredió a cinco jóvenes en Moncloa en diciembre de 2006, según una de las víctimas. Uno de los agredidos recibió una patada que le partió el peroné.

"Le dije que era un nazi y me dijo que sí, que era un fascista", afirma la víctima

A G. E. todavía le dura el susto, y siente "rabia e impotencia", porque asegura que son situaciones que se repiten y "nadie hace nada". El agredido relata que el suceso ocurrió cuando esperaba el autobús en la calle de Cirilo Palomo, en pleno centro de Pozuelo, para ir a Madrid.

"Pasó un coche y noté que el conductor me hacía señas violentas, como si me quisiera decir que me había reconocido", relata. El atacante paró su coche, se bajó y fue hacia la víctima. "Me cogió del cuello, me empujó y me golpeó en la frente mientras me insultaba. Me llamó rojo de mierda, y me dijo que cuando él pasara yo tenía que agachar la cabeza y no mirarle", continúa G. E.

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"Estaba muy asustado, es mayor que yo y no podía hacer nada. Luego se marchó y me dejó allí. La gente que había en los alrededores me miraba, pero nadie me ayudó", prosigue. La víctima acudió con su madre al centro de salud de Pozuelo. Allí se encontraron con el presunto agresor y su padre. "Mi madre se acercó para recriminarle su actitud. Entonces dijo otra vez que éramos unos rojos y que no le podíamos mirar. Yo le dije que era un nazi y él me dijo que sí, que era un fascista", añade.

El PSOE, en la oposición, reprocha al Gobierno municipal de Pozuelo, del PP, que no dé importancia a estos ataques. "El Ayuntamiento siempre dice que son gamberradas... La clave para acabar con estas situaciones es que el alcalde reconozca que existen estas personas que se dedican a atacar por cuestiones ideológicas", afirma la concejal socialista Marta Calvo. Otro problema, dice, es el miedo a denunciar.

El Consistorio no hizo declaraciones sobre el suceso.

Pintadas con la esvástica, símbolo nazi, en la fachada de un edificio.
Pintadas con la esvástica, símbolo nazi, en la fachada de un edificio.RICARDO GUTIÉRREZ

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Sobre la firma

Esther Sánchez
Forma parte del equipo de Clima y Medio Ambiente y con anterioridad del suplemento Tierra. Está especializada en biodiversidad con especial preocupación por los conflictos que afectan a la naturaleza y al desarrollo sostenible. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y ha ejercido gran parte de su carrera profesional en EL PAÍS.

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