Urbanismo y protección del patrimonio
En relación al patrimonio, en los territorios se manifiestan las luchas y las tensiones entre distintas fuerzas. Aquellos que consideran que todo lo que en el territorio existe tiene una dimensión económica que prima sobre las otras, y que urgen para que los plazos de planificación se adecuen a esa dimensión. Pero están también aquellos que deben imponer pausa, impulsar la integralidad de los procesos y defender que los recursos patrimoniales y culturales sean mirados y tenidos en cuenta desde otras perspectivas. Éste debe ser el papel de la Consejería de Cultura.
Tras los descubrimientos que se están haciendo en Castilleja de Guzmán alrededor del extraordinario dolmen de Montelirio, que incluyen cuatro nuevos dólmenes, el delegado de Cultura convoca una rueda de prensa y aparece dándole legitimidad técnica y política a la rapidez con que se desarrollan las excavaciones, guiadas por intereses urbanizadores. Hay una duda que las promotoras inmobiliarias ya tienen resuelta: ¿se excava para construir o se excava para conocer, profundizar, relacionar las partes de lo que se encuentra, y después valorar las distintas posibilidades científicas, sociales y de puesta en valor de lo que aparece?
La Consejería de Cultura, y el alcalde, en el caso de Montelirio, parece que también han resuelto esa duda aliándose con las fuerzas urbanizadoras. Primero, reduce el perímetro de protección del dolmen para que quepan un geriátrico y un supermercado en su entorno, aunque hay un informe en contra, que simplemente no aparece en el expediente; y después, el delegado se lanza a decir a los cuatro vientos que los restos de los cuatro dólmenes que acaban de aparecer están muy deteriorados, ninguneando así su valor.
¿Quién va a reclamar pausa, mirada de conjunto y unos mínimos principios para que no sea devastado uno de los conjuntos dolménicos más importantes del calcolítico europeo? Podemos hacerlo los ciudadanos, pero, por favor, que entonces nos ahorren el sueldo del delegado de Cultura.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.