Detenidos dos conductores de autocar por transportar ropa falsificada desde Italia

Jesús Mario S. S., de 37 años, y su compañero José L. V., de 58, decidieron hacer más rentables los casi 1.500 kilómetros que separan Nápoles de Girona. Es el trayecto que debían recorrer semanalmente como conductores de una empresa de autocares. Ambos han sido detenidos por agentes del Cuerpo Nacional de Policía, acusados de un delito continuado contra la propiedad industrial. Jesús Mario y José se dedicaban a transportar ropa falsificada desde Italia, que después era vendida por distribuidores locales en distintos municipios de la Costa Brava.

A lo largo de una ruta que parte de Nápoles y pasa por Roma, Florencia y Venecia, los dos conductores detenidos compraban grandes cantidades de género de confección. Todas las prendas eran falsificaciones de prestigiosas marcas. El hecho de ser conductores se reveló como una tapadera ideal, ya que camuflaban la mercancía dentro del maletero del autocar, junto al equipaje de los pasajeros. Cada semana podían llegar a importar hasta 10.000 artículos falsos, que pasaban la frontera sin demasiada dificultad. Ya en territorio español, los intermediarios recogían las prendas en áreas de descanso cercanas a la frontera.

El negocio era bastante lucrativo. Cada año, Jesús Mario y José se embolsaban unos 120.000 euros netos de beneficio, según explicaron en sus declaraciones ante la policía. Ambos trabajaban por encargo. De hecho, la policía detuvo también a ocho distribuidores, que eran propietarios de establecimientos abiertos al público en Lloret de Mar, Roses y L'Estartit. Entre ellos está uno de los principales clientes de los conductores, J. N. R., que posee una sociedad de venta y distribución en Pineda de Mar.