Kabul baraja el uso de la fuerza para liberar a los rehenes coreanos

Los 22 misioneros surcoreanos secuestrados en Afganistán suman hoy 10 días de cautiverio en medio de la negativa de las autoridades a descartar el uso de la fuerza para liberarlos, medida que, según los talibanes, causará la muerte de los cautivos.

El viceministro del Interior afgano, Munir Mangal, dijo ayer que de no encontrar una solución pacífica, el último recurso podría ser el uso de la fuerza. El portavoz de los talibanes, Qari Yusef Ahmadi, advirtió de que cualquier agresión llevará una respuesta. "Tenemos suficientes fuerzas para defender nuestra posición, pero incluso si intentan atacarnos no podrían llevárselos vivos", amenazó Ahmadi. Los rebeldes mataron el pasado miércoles a uno de los rehenes. El cadáver de Bae Hyun-kyu, de 42 años, y líder de los misioneros, apareció con 10 tiros.

Las negociaciones para la liberación entraron en una nueva fase con la llegada el viernes a Kabul de un enviado especial de Seúl que tiene previsto reunirse con el presidente Hamid Karzai.

Mientras tanto, tres soldados de la OTAN y un militar afgano murieron en enfrentamientos contra los talibanes, según fuentes de la alianza atlántica. Dos de los fallecidos eran de origen estadounidense y el otro británico. Con estos fallecimientos, la OTAN suma más de 90 bajas en Afganistán en lo que va de año.