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Tribuna:COYUNTURA INTERNACIONAL
Tribuna
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Diferente Inglaterra

Esta semana, el Banco de Inglaterra ha vuelto a elevar en 25 puntos básicos su tipo de intervención, hasta situarlo en el 5,75%, lo que supone alcanzar prácticamente el máximo del anterior ciclo alcista, que finalizó en el 6,0% en febrero de 2000. De esta forma, el proceso de endurecimiento de las condiciones monetarias ha llegado más lejos que en EE UU, donde se acaba de cumplir un año de estabilidad de los fed funds.

¿Qué diferencia existe entre sendos países? La más importante, la dispar evolución del mercado inmobiliario: los precios de la vivienda en el Reino Unido no sólo han continuado creciendo, sino que han acelerado su tasa de avance, hasta situarse en el 11,0%. Sin el lastre de la incertidumbre sobre el comportamiento de este mercado (en claro contraste con Estados Unidos), el resto de partidas del PIB continúan mostrando un claro dinamismo.

Esta semana el Banco de Inglaterra ha vuelto a elevar en 25 puntos básicos su tipo de intervención, hasta situarlo en el 5,75%

El consumo privado avanza por encima del 3,0% (y acelerándose), favorecido por un mercado laboral que se mantiene en pleno empleo. Y, como en el resto de países, la inversión empresarial atraviesa un momento dulce, con una expansión del 10%.

En definitiva, es lógico que el PIB crezca al 3,0%, una tasa que podría conservar en próximos trimestres, con el riesgo al alza que supone para la estabilidad de los precios. Un riesgo nada despreciable considerando que la inflación está situada en el 2,5% (el objetivo del BOE es un 2%).

Con este panorama parece justificable que la autoridad monetaria se muestre más agresiva que otros bancos centrales, ampliando su diferencial de tipos de interés frente al dólar, manteniéndolo alto frente al euro, y muy elevado contra el yen.

Las implicaciones son claras, al menos, en el mercado de divisas. Así, los denominados carry trades pueden extenderse a la libra esterlina como moneda de inversión, por lo que podría apreciarse más frente al yen, al dólar (esta semana ha marcado máximos de los últimos 29 años) y al euro. Si nuestra moneda pierde valor frente a la británica, puede ser un alivio en términos de tipo de cambio efectivo real para compensar la apreciación frente al dólar, de la que esta semana hemos tenido nuevas evidencias.

(*) Profesores de la Escuela de Finanzas Aplicadas (Grupo Afi)

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