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Reportaje:

Granada echa el resto por la Alhambra

La ciudad se vuelca para ganar votos en la pugna para convertirse en nueva maravilla del mundo esta noche en Lisboa

Javier Martín-Arroyo

En Granada, reina el optimismo. La candidatura de la Alhambra para el concurso de las siete nuevas maravillas, que culmina esta noche con una gran gala en el estadio Da Luz de Lisboa, ha movilizado a la ciudad, ha ensalzado su orgullo y ha puesto de relieve su capacidad para seducir. Los granadinos han apoyado una campaña imaginativa y masiva, con diversas fórmulas que han logrado sumar votos para el monumento más visitado del país. Tras varias semanas de intensa propaganda, anoche se cerró la marea de márketing y los responsables de la campaña confían en haber remontado puestos para colarse entre los siete magníficos.

La Alhambra no figuraba entre las siete maravillas esta pasada primavera, pero los responsables de la campaña confían en que el recuento de votos obtenidos en la recta final haya dado un vuelco a la clasificación. "Las últimas iniciativas le han dado ese impulso final que el monumento nazarí necesita", declaró ayer el concejal de Cultura de Granada, Juan García Montero.

Los alcaldes de 30 ayuntamientos emitieron un bando para animar al voto
Un cálido abrazo de más de 8.000 personas rodeó el monumento la pasada primavera

Para levantar al ciudadano de su asiento ha habido de todo. Las pasadas elecciones municipales hicieron que los políticos predicaran con el ejemplo, y desde el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, hasta los concejales de los pueblos más recónditos de la provincia, aprovecharon la oportunidad de posar con la sonrisa y frente a un puesto habilitado para votar a través de la web de la organización, la fundación New7Wonders. A la campaña se han sumado los responsables de la Junta, el Patronato de la Alhambra, y el Ayuntamiento, cuyos intereses comunes rara vez coinciden. "No estar dentro de las siete maravillas no significaría ningún perjuicio para la Alhambra. Si somos la octava, seremos la octava maravilla", apuntó optimista la consejera de Cultura, Rosa Torres.

Durante el estado de la nación, los grupos parlamentarios del Congreso pudieron votar en un punto interactivo para apoyar la candidatura. Además, los alcaldes de una treintena de ayuntamientos de la provincia emitieron un bando municipal para pedir a sus vecinos que votaran por la candidatura granadina. La idea partió del alcalde de Jun, José Antonio Rodríguez, que remitió la propuesta del bando a los 8.111 alcaldes de la Federación Española de Municipios se adhirieran y lograr unos 100.000 votos en el tramo final de la carrera. Colectivos sociales, empresas y particulares han animado a votar por teléfono o internet, siempre previo pago, eso sí, por el monumento.

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Entre las más propuestas más llamativas destacó un cálido y multitudinario abrazo que movilizó a ocho mil personas para rodear a la Alhambra. La difusión alcanzada por su impacto visual dinamizó una campaña de apoyos que desde entonces creció en cascada.

Los empresarios de la ciudad vieron cómo sacar tajada y se apuntaron a la campaña. La diseñadora de zapatos Marifé Peinador descontó durante un par de días hasta un 60% a los clientes que votaran por teléfono móvil desde su tienda. La pasión de la diseñadora le hizo incluso a dedicar una colección de zapatos al monumento en el pasado.

Si el restaurante Chikito desplazó hasta distintas zonas de la ciudad un coche de época restaurado para que el público pueda votar antes de cruzar la calle, la inmobiliaria Re Max Alsur descontó hasta 500 euros para la compra de cualquier vivienda después de obtener un certificado al votar por teléfono. Una empresa de clínicas dentales distribuyó 100.000 marcapáginas entre distintas ciudades del país donde está implantada.

Sin embargo, la palma de los devotos se la ha llevado Miguel Ángel Bernardo. Este vecino asegura haber votado 3.391 veces desde que hace cuatro años comenzó la pugna. Trabaja como recepcionista y a diario explica a los clientes extranjeros cómo deben votar para la Alhambra, pero durante los últimos meses ha recorrido sin descanso los puntos de la ciudad donde se puede votar de manera gratuita. "Estoy obsesionado pero no me canso. Nos viene bien a todos y traerá mucho turismo", decía.

Además, casi todos los programas de televisión y radio de ámbito nacional se han desplazado esta pasada primavera en alguna ocasión hasta la Alhambra para montar su plató. Aunque la difusión de la competición mundial repercutirá en el turismo de la ciudad, la Alhambra apenas incrementará su número de visitas, ya que a diario se agotan sus entradas y al tratarse de un monumento protegido éstas no pueden incrementarse.

Del concurso se desmarcó la Unesco, que no apoyó la iniciativa privada, pero este abandono internacional no parece haber frenado el entusiasmo colectivo en la ciudad. Al contrario que en otros países europeos donde han visto esta iniciativa privada con recelo por obtener un enorme beneficio económico a través de sus más de 90 millones de votos, las instituciones públicas se han volcado para que la Alhambra figure alto en esta competición.

Esta noche una gala con actuaciones de cantantes como Miguel Ríos conectará desde el Paseo del Salón con Lisboa para seguir el transcurso de la gala. Junto a cantantes, pintores y actores locales han difundido su apoyo a la candidatura. Entre los defensores más entusiastas e incisivos están los que al tiempo que aconsejaban el voto por la Alhambra, alertaban para no apoyar a monumentos como el Coliseo romano o la Torre Eiffel parisina, sus supuestos competidores directos en la recta final.

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Sobre la firma

Javier Martín-Arroyo
Es redactor especializado en temas sociales (medio ambiente, educación y sanidad). Comenzó en EL PAÍS en 2006 como corresponsal en Marbella y Granada, y más tarde en Sevilla cubrió información de tribunales. Antes trabajó en Cadena Ser y en la promoción cinematográfica. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla y máster de EL PAÍS.

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