Bronca entre las cadenas por la publicidad

El reparto de la publicidad ha provocado un duro enfrentamiento entre TVE y las cadenas privadas. La ley permite a los operadores emitir 12 minutos por hora, pero las emisoras comerciales han pedido al Gobierno que en las públicas el tope sea de nueve minutos. Además, Antena 3 ha reclamado que La 2 esté exenta de publicidad, propuesta que no ha gustado al director de TVE, Javier Pons, quien ha arremetido contra Maurizio Carlotti, consejero delegado de la privada: "Lleva recibiendo una goleada permanente en audiencia de su principal competidor, Paolo Vasile".

Carlotti abrió el martes la caja de los truenos al plantear la posibilidad de que en TVE rijan limitaciones publicitarias más estrictas de las que se aplican al resto de las televisiones. Esta opción está recogida en la ley que desde hace un año regula la radio y la televisión de titularidad estatal. Pero hasta el momento, TVE juega en el mercado publicitario con las mismas normas que las privadas, pese a que recibe alrededor de 500 millones de euros de subvención de las arcas del Estado.

Durante su intervención en los cursos de verano de la Universidad Complutense de Madrid, Carlotti criticó que TVE haya desterrado los programas de servicio público a la madrugada para competir en los horarios de máxima audiencia con los mismos contenidos que las privadas. "Para hacer lo mismo que las competidoras no tiene sentido que se gasten 500 millones si las privadas lo hacen gratis", argumentó el consejero delegado de la cadena que controla Planeta. Al tiempo, propuso "liberar" a La 2 de la presión publicitaria para que emita programas "de verdadero servicio público".

Pons respondió 24 horas después en el mismo foro con un áspero ataque a Carlotti. Dijo que el consejero delegado de Tele 5, Paolo Vasile, "le está metiendo todos los domingos un 4-0". Y agregó: "En vez de centrarse en su propia estrategia para superar ese delicado momento, opta por intentar desviar la atención criticando constantemente a la televisión pública. ¿Por qué lo hace? ¿Para no explicarle a los accionistas de Antena 3 que Vasile con menos gastos consigue más ingresos y mejor audiencia?".

Ni rivales ni enemigas

Para el director de TVE, las televisiones públicas y privadas deben buscar la colaboración y fomentar la complementariedad. "No somos rivales o enemigas. Somos complementarias", argumentó Pons. Hasta ahora, TVE ha competido en el mercado de la publicidad con la misma energía que en el de las audiencias. En este segmento, el grupo estatal registró en junio el peor dato de sus 50 años de historia, con el 16,3% para La Primera. La 2 logró el 4,8%.

La propuesta de recorte publicitario altera "las reglas recogidas en la ley", según Pons, para quien la eliminación de los anuncios en La 2 "no está en la ley que el Parlamento ha aprobado hace sólo un año". "Nosotros haremos lo que nos diga el Parlamento", precisó.

Sin embargo, la ley establece que TVE deberá "incorporar restricciones adicionales" a las establecidas con carácter general a todas las televisiones. Y especifica que estas limitaciones se concretarán en el contrato-programa, un marco financiero que RTVE tiene que negociar con el Ministerio de Economía y Hacienda.

Tele 5 no es ajena a la polémica. Su presidente, Alejandro Echevarría, recordó en la junta de accionistas de este año que TVE está incrementando notablemente "los índices de saturación publicitaria", circunstancia que agrava "los defectos" de la doble financiación. "Esta situación debe cesar de inmediato, y el Gobierno debe, de una vez, dar respuesta al compromiso contraído con las televisiones privadas e imponer claros límites publicitarios a las cadenas públicas; a todas, empezando por TVE", agregó.

A través de un comunicado, Uteca, la entidad que agrupa a las televisiones privadas, abundó ayer en la necesidad de que las públicas ofrezcan una programación de servicio público y accedan al mercado publicitario "en condiciones distintas y más restrictivas" que las privadas. Esta asociación recordó que en la Unión Europea las emisoras comerciales y las públicas "no compiten deslealmente" en el mercado publicitario y, además, ofrecen contenidos diferentes.