La fiesta mayor de Sant Pere, en Terrassa, celebra dos 'castells de nou'

Fiesta mayor de Sant Pere agridulce para los Minyons de Terrassa en la actuación celebrada ayer domingo en su localidad. Hubo satisfacción, por un lado, por completar su segundo tres de nou amb folre de la temporada, pero desánimo al mismo tiempo al ver que el quatre de nou amb folre de la segunda ronda cedió una vez coronado. Tampoco pudieron finalmente afrontar la torre de nou amb folre i manilles que tenían previsto intentar.

Una actuación en la vigilia correcta, el sábado por la tarde, con el tres de vuit, el quatre de vuit y la torre de vuit amb folre hacía presagiar una buena actuación al día siguiente. Pero hablar de torre de nou es hablar de un gran reto que no sólo requiere un número elevado de gente en su estructura, sino que también demanda ensayos multitudinarios para poder llevar el castell a la plaza con seguridad.

Tiempo tienen de todos modos los de la camisa malva para afrontar de nuevo este reto, puesto que la temporada no ha hecho más que comenzar. Con lo que seguro que no contaban los egarenses es con lo que sucedió en la segunda ronda. Tras completar el tres de nou amb folre de salida, atacaron el quatre de nou amb folre, que cedió en el descenso. Fue un contratiempo para los Minyons, que de largo son la agrupación más segura con este castell. La tercera ronda sirvió para cerrar su exhibición con un buen sabor de boca al completar su primer cinc de vuit de la temporada.

Compartieron plaza con ellos los Capgrossos de Mataró, que poco a poco van elevando su nivel y completaron junto con el tres y el quatre de vuit, su primera torre de vuit amb folre del año.

La otra agrupación local, los Castellers de Terrassa, en gran forma en este inicio de curso, se hicieron con el cinc de set, el quatre de vuit y la primera torre de set de la temporada.

Otra exhibición destacada de este fin de semana tuvo lugar el sábado por la tarde en Vilafranca del Penedès en el marco de la feria Vijazz, una curiosa mezcla de feria vinícola con un festival de jazz, en la cual los Castellers de Vilafranca ejecutaron con solvencia la torre de vuit amb folre, el quatre de vuit amb l'agulla y el tres de vuit (descartaron finalmente el primer intento del año previsto del cinc de vuit), pero sobre todo un titánico pilar de set amb folre, que tuvo que ser batallado a conciencia durante el descenso para poder completarse.

Finalmente, cabe destacar también la actuación celebrada en el tarraconense barrio del Serrallo, con motivo de la festividad de Sant Pere, en la cual una colla Vella de Valls en forma completó su primer pilar de sis del curso junto con el dos folrat, el tres y el quatre de vuit. A su lado, los Xiquets de Tarragona lograron el tres de vuit, junto con la primera torre de set que completan esta temporada. Los locales Xiquets del Serrallo completaron estructuras de siete pisos.