Chirac tendrá que comparecer ante los jueces este verano

Jacques Chirac ya tiene fecha para comparecer ante el tribunal que instruye el sumario de los falsos empleos de la alcaldía de París. Será antes del próximo 15 de septiembre. El anterior presidente francés acudirá en calidad de "testigo asistido" acompañado por su abogado. Esta condición significa que Alain Philibeaux, el juez que lleva el caso, cree que Chirac puede estar implicado en este caso de financiación ilegal de partidos.

Chirac perdió la inmunidad que le otorgaba su condición de jefe del Estado el pasado día 16. El abogado del ex presidente, Jean Veil, reconoció haber recibido una copia del sumario del asunto de los empleos ficticios de la alcaldía de París: 15 volúmenes de 2.000 páginas cada uno; 30.000 páginas en total. Según Veil, aunque la fecha de la comparecencia está "en manos" del tribunal, es "muy probable" que sea antes del 15 de septiembre. Veil precisó que el ex presidente se presentará ante los jueces siempre que sea convocado y responderá a todas las preguntas que "eventualmente" le conciernan, porque "es un ciudadano como cualquier otro para el periodo anterior a 1995".

De este modo, Veil dejaba claro que Chirac no responderá de nada de lo que se le pueda imputar mientras fue presidente de la República, lo que deja fuera el llamado caso Clearstream, los falsos listados de comisiones por la venta de fragatas de la empresa Thompson a Taiwan, que sirvieron para acusar falsamente de corrupción a industriales y políticos franceses, incluido el actual presidente, Nicolas Sarkozy. Tampoco parece que se le pueda implicar en las supuestas presiones para ocultar las circunstancias de la muerte del juez Borrell en Yibuti en 1995, donde Francia tiene una importante base estratégica.

15 horas de interrogatorio

"Todos los ciudadanos deben ser protegidos", dijo Veil, "el presidente de la República representa en Francia y en el extranjero una institución particular que justifica no que sea tratado de forma diferente, pero sí con un mínimo de consideración". Y en una clara referencia a los jueces Jean-Marie D'Huy y Henri Pons, que instruyen el caso Clearstream, el abogado recordó implícitamente el interrogatorio de 15 horas a que sometieron al entonces primer ministro Dominique de Villepin, señalando que se asemeja "de alguna manera a una tortura".

Según Veil, sobre los asuntos sucedidos mientras ocupaba la jefatura del Estado, Chirac tiene "inmunidad definitiva". El artículo 67 de la Constitución y el principio de la separación de poderes hacen que sea imposible convocar judicialmente al anterior jefe del Estado por lo sucedido durante su mandato, señaló.

El sumario investiga los "empleos ficticios" que creó la alcaldía de París para determinadas personas que, en realidad, trabajaban para el Reagrupamiento por la República (RPR), el partido creado por Chirac en 1976 y que se integró en 2002 dentro de la Unión para un Movimiento Popular (UMP), ahora en el poder.

En un primer juicio, el ex primer ministro Alain Juppé, entonces número dos del RPR y del consistorio parisiense, fue condenado a una pena de cárcel que no cumplió y un año de inhabilitación. El sumario incluye una nota firmada por el propio Chirac en 1993 en la que pide que se recompense a un empleado del Ayuntamiento por la "calidad de su trabajo" en favor del Jean-Claude Patsy, un miembro del RPR.

El Tribunal Supremo rechazó ayer los recursos interpuestos por cuatro de los procesados en el caso de los llamados "empleos de complacencia", el segundo de los casos en los que podría estar implicado Chirac. Se trataba de empleos o "misiones", también a cargo de la alcaldía de la capital, que se proporcionaron a determinadas personalidades políticas durante el periodo 1983-1998, bajo el mandato de Chirac y de su sucesor, Jean Tiberi. El alto tribunal dio validez ayer al procedimiento que afecta hasta a 20 personas.

En total son cuatro los sumarios de esta época. Los otros dos fueron abiertos por malversación de fondos públicos en el caso de la imprenta municipal Sempap y por receptación de bienes societarios, por haberse beneficiado Chirac y su familia de vuelos por valor de más de 400.000 euros a costa de la aerolínea Euralair, que acabó por declararse en quiebra. Algunos escándalos, como el de las millonarias facturas de los restaurantes de lujo que cargaba al Consistorio, no han acabado en los tribunales.