Los socialistas gobernarán en solitario en Vilagarcía

Iba a ser un gobierno tripartito pero, antes de la proclamación de Enrique León como alcalde de Vilagarcía, IU anunció su retirada. Ahora lo ha hecho el BNG, necesario para garantizar la estabilidad del gobierno municipal. Al portavoz nacionalista le ha parecido "poco" lo que iba a recibir a cambio y dejará a los socialistas que inicien esta legislatura en solitario, con siete concejales frente a los 14 que aglutinan los otros cuatro partidos.

Así lo anunció ayer León en la que fue su primera comparecencia una semana después de llegar a la alcaldía. Aunque no dio por rotas las negociaciones con sus socios de izquierdas, y cree que "siempre están a tiempo de rectificar", León emprende esta legislatura en minoría porque, dijo, "esta ciudad no puede esperar a la firma de unos pactos, y el ciudadano quiere que se hagan las cosas bien".

León y su equipo han calificado de "generosas" las ofertas y las concesiones que ha recibido el BNG para que sus tres concejales entraran a formar parte del ejecutivo. El alcalde les dejó escoger dos áreas y finalmente se decidieron por la económica, que incluye Turismo, Comercio e Industria, entre otras, y la de Asuntos sociales y Sanidad.

Motivo de la discordia

Pero el desacuerdo surgió cuando el portavoz nacionalista, Xosé Castro Ratón, exigió sumar más competencias al cargo de primer teniente de alcalde que también estaba dispuesto a cederle el PSOE. El motivo de la discordia son tres áreas, Cultura, pero sobre todo Comunicación y Relaciones Institucionales, que León considera inherentes a las atribuciones de la alcaldía y que no va a ceder.

Las negociaciones quedaron rotas el viernes, en la última reunión que mantuvieron ambas formaciones y que llevaron a los socialistas a mantener una posición "firme pero abierta al diálogo" que fue definida por los nacionalistas como "abocada al fracaso". Recordó León que la cesión de la primera tenencia de alcaldía no estaba prevista en el acuerdo marco de gobernabilidad firmado entre socialistas y nacionalistas, que dejó fuera a Ferrol y Vilagarcía. "Aún así creo que fuimos suficientemente generosos y equitativos con el reparto de escaños que hemos obtenido unos y otros", subrayó.

Pese a la situación en la que queda por la falta de acuerdo con BNG e IU, León afirmó que emprende esta etapa con "absoluta serenidad" y confía en que, finalmente, se impondrá el sentido común y una línea de diálogo dentro de lo razonable. "Desafortunadamente tengo que decir que los nacionalistas no tienen especial interés en participar en el gobierno, pero hay muchos proyectos por hacer y Vilagarcía no puede esperar", León.