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La política de alianzas tras el 27-M

El PSE logra por sorpresa presidir el Parlamento de Guipúzcoa con el voto del PP y de Ezker Batua

La socialista Rafaela Romero (Quintana de la Serena, Badajoz, 1972) resultó ayer elegida presidenta de las Juntas Generales de Guipúzcoa (Parlamento provincial) en una insólita votación que evidenció la división existente en el tripartito vasco (PNV, EA y EB). Es la primera vez que el PSE logra acceder a ese cargo desde la restauración de la Cámara provincial en 1979. Romero asumió la presidencia en la segunda votación con los votos de su partido, los del PP y el sorprendente apoyo recibido de los cuatro junteros de EB, que en la primera vuelta habían votado al aspirante peneuvista.

Los partidos llegaron a la sesión de ayer sin tener atados los acuerdos. El PNV y EA, que presentaron cada uno a su propio candidato, habían acordado votar conjuntamente al segundo. Socialistas y PP también tenían pactado votar a Romero. La única incógnita era el sentido del voto de la coalición EB-Aralar (cuatro y dos junteros, respectivamente), que al final fue determinante en la elección de la presidencia.

En la primera vuelta, ningún aspirante obtuvo mayoría absoluta, ya que los seis representantes de EB-Aralar votaron al candidato del PNV. Al no tener ninguno de los aspirantes mayoría absoluta, hubo que ir a la segunda vuelta. Tras un breve receso, que PNV y EA aprovecharon para reunirse, ambos partidos volvieron a votar al segundo, mientras que Romero sumaba sorprendentemente a las papeletas de su partido y el PP las cuatro de EB.

El líder de los socialistas guipuzcoanos, Miguel Buen, explicó después que había un pacto previo entre su partido y EB para respaldar a Romero. Mikel Izagirre, portavoz foral de EB, lo negó y aseguró que la decisión de apoyar a los socialistas en la segunda ronda se tomó mientras se estaba celebrando la sesión.

Buen, quien anunció que ahora tiene el objetivo de "ir a por la Diputación", desveló que "los acuerdos con EB estaban cerrados antes del pleno". Los socialistas ganaron las elecciones forales el 27-M con 16 junteros y 5.000 votos más que el PNV (otros 16). EA tiene siete representantes, EB-Aralar seis y el PP otros seis. Dirigentes del PNV y EA divergieron en sus explicaciones de lo ocurrido, mucho más duras con EB en el caso de Eusko Alkartasuna. El resultado supone un revés claro para las pretensiones del presidente peneuvista en Guipúzcoa y cabeza del sector crítico, Joseba Egibar.

En las Juntas de Vizcaya, mientras, todo transcurrió según lo previsto y la peneuvista Ana Madariaga resultó reelegida presidenta con los votos de su partido, EB-Aralar y EA. El PNV, el PSE, el PP y EB se reparten los puestos de la Mesa tras el pacto que cerraron el jueves.

El pleno para la elección de diputado general está previsto para el 2 de julio en Guipúzcoa y aún no tiene fecha en Vizcaya.

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