Las enfermeras asumirán tareas que hasta ahora eran exclusivas de los pediatras

Enfermeras y médicos de cabecera asumirán competencias que hasta el momento tienen en exclusiva los especialistas en pediatría. El aumento de la natalidad obliga. La inmigración ha pulverizado los pronósticos que en la década de los noventa apuntaban a un descenso de nacimientos y Cataluña se enfrenta a ese cambio demográfico con un déficit de pediatras. Aunque la atención primaria ha ganado 107 nuevos pediatras en los últimos tres años, el número sigue siendo insuficiente y las enfermeras están llamadas a tener mayores dosis de protagonismo en el cuidado de menores de entre 0 y 14 años.

"La salud de los niños catalanes es buena o muy buena, pero hemos detectado nuevos riesgos como la obesidad, los accidentes de tráfico o problemas derivados del consumo de drogas que hay que vigilar", explicó ayer la consejera de Salud, Marina Geli, durante la presentación del Plan de Ordenación de la Atención Pediátrica en la Atención Primaria 2007-2010. Este documento, que se aprobará previsiblemente en septiembre, busca solucionar la "sobrefrecuentación" a la que se enfrentan los CAP y los servicios de urgencias. Geli está persuadida de que el remedio pasa por otorgar más competencias a las enfermeras.

Reforma con coste cero

Pero la medida no ha gustado a este colectivo, que lleva tiempo exigiendo un aumento de la plantilla. "Vemos con sorpresa que se quieren incrementar nuestras competencias a coste cero y sin ningún incremento de personal", señaló ayer Montse Peña, secretaria del sindicato de enfermería SATSE-Cataluña. "Las enfermeras no queremos hacer ni de médicos ni de pediatras", añadió, "pero sí que estamos dispuestas a discutir una ampliación de nuestras funciones, dentro de un marco legal adecuado que delimite nuestras competencias y actúe de paraguas jurídico. Esta ampliación conlleva necesariamente un aumento de plantilla. La enfermera ya está sobrecargada de trabajo y no puede asumir nuevas funciones sin tener más personal", sentenció.

Una vez aprobado el Plan, el pediatra hará el diagnóstico inicial de la patología, como es habitual, pero tanto la enfermera como el médico de familia harán un seguimiento activo de la enfermedad, gestionarán el calendario de vacunas y harán diagnósticos en caso de que se detecten alteraciones en el curso de una enfermedad leve. Además, se encargarán de tareas de educación para la prevención y promoción de la autocura. Actualmente todas estas funciones están fuera de sus competencias o las desarrollan en circunstancias excepcionales.

Geli insistió en que "está garantizada" la asistencia de los niños por parte de personal cualificado. "No hay que olvidar que en la atención continuada se trata de atender a niños que ya se conocen y que tienen un historial clínico", dijo la titular de Salud.