Un conductor muere apuñalado por un motorista en Girona
Estupor en Vidreres (Selva) tras conocerse la muerte violenta del vecino Luis Heredia, de 25 años, apuñalado por un motorista que le hizo señales para que detuviera el vehículo, le agredió y se dio a la fuga. Los hechos sucedieron en la medianoche del lunes en la carretera N-II, a la altura de Caldes de Malavella (Selva), a donde el joven se dirigía para dejar a un amigo. Según las primeras investigaciones, una moto de gran cilindrada se situó detrás del vehículo donde iban los dos amigos y comenzó a hacerles señales luminosas para que se detuvieran. Tras varios intentos de adelantamiento, el motorista les avanzó y les hizo señas para que parasen.
La víctima, intrigada por las indicaciones, detuvo el vehículo y se dirigió hacia él. Según familiares de Luis Heredia, sin mediar palabra y sin discusión previa, el motociclista, que no se quitó el casco, le asestó una cuchillada. La rapidez y brutalidad del apuñalamiento culminó con la inmediata huida del agresor a lomos de su potente motocicleta y dejó a la víctima tirada en el suelo, perdiendo mucha sangre.
El amigo de Heredia y único testigo de los hechos, horrorizado, sólo alcanzó a ver que la matrícula de la moto era francesa, aunque no la pudo memorizar. El joven recogió del suelo al herido y lo trasladó al centro de atención primaria de Caldes de Malavella. De allí lo derivaron hacia el hospital Josep Trueta de Girona, donde falleció.
El padre del joven, que encabezó en las pasadas elecciones la lista de Ciutadans en Vidreres, señaló ayer que la muerte de su hijo pudo deberse a un juego de rol.
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