Villaverde 'online' y en papel

Cinco adolescentes a bordo de una furgoneta deciden viajar por Europa sin mapa, dinero ni destino fijo, con la idea de encontrar aventuras y ligues. Así comienza el "cadáver exquisito online" -o libro colectivo escrito en la Red por varias personas-, propuesto por la asociación de vecinos de Villaverde, El Espinillo (www.elespinillo.org). Ayer culminaba el proceso de creación con la presentación de la novela terminada bajo el título de El verano del 99.

"Éste es el tercer libro que hacemos, con la idea de implicar a los vecinos a través de la Red. Otras veces lo han comenzado los escritores Lorenzo Silva y Joaquín Leguina, y en esta ocasión el primer párrafo pertenece a Rosa Regàs. A partir de ahí seguimos nosotros", explica Ernesto Rodríguez, uno de los 12 autores que colaboró en la historia y se encargó de su gestión informática.

No sólo se implicaron los vecinos de Villaverde en la escritura. Con un censo de 127.577 habitantes registrados en el distrito en 2001, la página web de El Espinillo recibió más de 325.000 visitas desde su apertura en 2005 hasta hoy. Poco a poco, la iniciativa literaria incluso había cruzado el Atlántico, con la participación de una autora peruana, que añadió páginas con sus particulares giros lingüísticos y expresiones distintas.

Otro de los participantes, Juan Antonio Narváez, inspiró la historia a partir del viaje personal que realmente hizo durante su juventud. Sólo los personajes son verídicos, mientras la aventura se compuso entre todos. "Intenté describir a mis amigos tan fielmente como los recordaba mi memoria", asegura Narváez. Y añade: "Decidimos dar una estructura predeterminada, porque los dos libros anteriores fueron difíciles de seguir, con demasiados personajes y cambios. Así que para hacerlo más fácil esta vez dimos el principio y el final, los personajes y el hilo conductor de un viaje por Europa".

El próximo cadáver exquisito de la asociación comenzará en noviembre y ya tiene tema: será una novela histórica sobre la tradición de Santiago El Verde, que se remonta al siglo XVI. "Ya tenemos a varios vecinos que acuden al archivo municipal, al Museo de San Isidro y a la Biblioteca Nacional para documentarse. Queremos escribir sobre la fiesta de la pradera que fue pintada por Goya. Es una historia poco conocida: allí fue donde un grupo de vecinos comenzó el levantamiento del 2 de May

o", anuncia Narváez.