El recaudador de "la jefa" detalló el sistema de la extorsión

Mientras que el PP intentaba sembrar meses atrás dudas sobre las pruebas y la legitimidad de la detención e imputación del equipo municipal de Telde al completo, los investigadores de este caso (juez, fiscalía anticorrupción y agentes de la policía adscritos) se mostraban confiados. Sabían que el sumario les daría la razón cuando se conociera su contenido.

Iban sobre seguro: a partir de la detallada denuncia en julio de 2005 de una empresaria extorsionada por el sistema de peaje impuesto desde la concejalía de Obras de Toñi Torres, fueron pinchando los teléfonos de todos los actores políticos y empresariales de esta red de pago de comisiones ilegales a cambio de favores municipales. Las escuchas dieron un amplio juego. El tráfico de llamadas entre Toñi Torres y su asesor, Francisco Gordillo, y entre éste y su red clientelar de empresarios extorsionados no dejaba lugar a dudas. Gordillo era su recaudador de sobornos. Ordenaba un intenso tráfico entre favores municipales y pagos ilícitos de empresarios.

Pero, con ser elocuentes sus charlas grabadas, más lo fue su declaración judicial: "Las empresas que han recibido una adjudicación, que pagan comisión y que he entregado a Toñi Torres son: Mazzoti, Dragados y Cobra. La ferretería Felipe y Nicolás también pagaba comisiones. Mi hijo ha hecho labores de intermediación con Cementos las Torres y recibir comisión por ello. Mi hijo era un mero transmisor". Y despeja a qué se refiere cuando habla de recoger "proyectos" o "planos" en tantas de sus charlas grabadas: "a sobres con dinero".

Apariencia de concurso

Gordillo, además, revela que para fingir la legalidad de los concursos, por ejemplo, "han presentado junto a la empresa Cobra a dos sociedades más vinculadas con ésta para dar apariencia de concurrencia mínima". Y si apela a "la jefa", se refiere a Toñi Torres. "Siempre actuaba bajo su dirección, Es ella la que me dice cuando se ha aprobado una obra. En ocasiones recibo yo el dinero o lo trae mi hijo, pero dichas cantidades siempre van a parar a Toñi Torres". En ocasiones, ha sido testigo de cómo dicha edil repartió la mitad de su comisión con un miembro del partido canario Ciuca.

Su hijo, Juan Francisco Gordillo, empleado de Cobra, no sólo reconoce que ha recogido determinadas comisiones, sino que asegura haber sido testigo "en varias ocasiones" de la entrega por su padre de tales pagos ilegales a Toñi Torres. Gordillo cifra en unos 90.000 euros los sobornos de los que ha tenido conocimiento directo y que salían de un porcentaje variable sobre el importe de la obra adjudicada.