Promesa educativa "ilegal"

La promesa electoral de Esperanza Aguirre de ofrecer actividades de voluntariado para los estudiantes de la Comunidad de Madrid que objeten a la asignatura de educación para la ciudadanía es "ilegal", afirma el Gobierno. Esta disciplina es obligatoria por ley y no puede dejarse de recibir a voluntad del alumno y mucho menos puede un Ejecutivo autónomo sustituirla por los contenidos que se le antojen; en este caso, actividades de voluntariado.

Esta materia tiene la misma categoría que, por ejemplo, matemáticas o lengua, y es más que discutible que haya alguna parte de su temario, recogido en un real decreto, a la que se pueda presentar una objeción de conciencia. En ella se enseñarán cuestiones como la igualdad de género, los derechos humanos, los derechos y deberes de los ciudadanos o la libertad de pensamiento. Además, una decena de sentencias del Constitucional señalan que "el derecho a la libertad ideológica en sí sólo no es suficiente para eximir a los ciudadanos por motivos de conciencia del cumplimiento de deberes legalmente establecidos".

En contraposición a lo declarado por Aguirre, el presidente de su partido, Mariano Rajoy, ha manifestado que "la ley hay que cumplirla", en referencia a la obligación de cursar esta materia, aunque ha prometido que si el PP gana las elecciones generales, reformará de nuevo la Ley de Educación para eliminar la polémica asignatura. La enseñanza volvería así a estar de nuevo en manos de intereses partidistas, a falta de un pacto educativo que no llega nunca, aunque sería lo deseable.

En el caso de que algún estudiante no curse esta materia, se arriesga además a no lograr el título de la ESO, una responsabilidad que Aguirre, con su llamamiento, hace caer en realidad en los padres.