_
_
_
_

Una historia de anécdotas

- La Palma de Oro más absurda. La palabra dada, del brasileño Anselmo Duarte. En 1962 el director del Festival quiso que ganara Los amantes de Teruel, de Raymond Rouleau. Truffaut, desde el jurado, logró desviar el voto hacia un filme que no gustaba mucho a nadie pero que no tenía enemigos.

- El más abucheado. L'Avventura, de Antonioni. Monica Vitti salió de la proyección llorando. El público no perdonó en 1960 la desaparición inexplicada de un personaje. Años después se vio que con Antonioni comenzaba el cine moderno.

- El mayor escándalo. La grande bouffe (1973), de Marco Ferreri. "Infierno y podredumbre", escribieron en Paris-Match. La presidenta del jurado, Ingrid Bergman, se quejó de que se hubiera seleccionado un filme "tan sórdido y vulgar". La sala se convirtió en batalla campal entre quienes defendían el derecho a tirarse pedos de Ugo Tognazzi y quienes consideraban que las ventosidades -y la fornicación, y la glotonería, y la muerte...- no debían oírse nunca en una pantalla.

Más información
David Fincher y Cristian Mungiu llevan el lado oscuro a Cannes

- Primer premio a la deslo-calización. Othello (1952), de Orson Welles. El filme se presentó como una producción marroquí. Y es el único premio internacional que ha ganado el cine de Marruecos. Agadir ofreció a Welles las murallas, los figurantes y los precios que buscaba. Luego la industria ha sistematizado los rodajes en otros países para reducir costes.

- Algunos errores. Belle de jour, de Buñuel, y Brokeback Mountain, de Ang Lee, no fueron seleccionadas.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_